Las mejores posturas para el parto

A pesar de que, durante años, la mujer ha dado a luz tumbada boca arriba, esta es la posición más desfavorable para el parto, puesto que suele requerir más intervenciones e instrumentalización, además de mayores lesiones en el periné.

Por ello, cada vez más hospitales ofrecen diferentes opciones a la hora del parto. Puedes preguntar en tu hospital o a tu matrona cuáles son las posibilidades que existen. 

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El parto es un proceso dinámico. Y puesto que la pelvis no es rígida y según cómo se coloque la madre para dar a luz puede permitir “ganar” unos milímetros en el cuello uterino, muy necesarios para que el parto en el expulsivo transcurra con normalidad. 

De pie

En esta posición, la fuerza de la gravedad ayudará en el descenso de la cabeza del bebé por la pelvis materna.

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Hay estudios que avalan que las posiciones verticales reducen el tiempo de dilatación, por lo que los partos son más cortos y menos dolorosos.

Cuadrupedia

Es decir, ponerse a cuatro patas, como si fueses a gatear. Esta posición, además de ser menos lesiva para el periné, facilita el nacimiento del bebé puesto que la pelvis queda totalmente libre.

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En cuclillas

Se puede usar una silla de partos u otro objeto en el que sostenerse.

En esta postura, se facilita la rotación de la cabeza del bebé porque el espacio en el interior de la pelvis para salir es máximo.

Además, podrás ayudar con tus propias manos en el nacimiento de tu bebé. 

Si me ponen la epidural, cómo puedo dar a luz

"Debemos tener en cuenta que la epidural puede reducir o incluso eliminar la movilidad de la mujer. Como veíamos antes, la movilidad es necesaria para la evolución del parto, por lo que reducir o eliminar la movilidad, va a dificultar el parto; en este caso, será tu matrona quién te ayuda a adoptar diferentes posturas. Además, cuando se administra la analgesia epidural ya no podemos considerar el parto como de mínima intervención, puesto que, por ejemplo, en este caso es necesaria una monitorización de la frecuencia cardiaca del bebé de manera continua.

Algunos hospitales públicos disponen de walking epidural, que, utilizando dosis de fármacos más bajos, consigue un alivio del dolor bastante significativo y se mantiene la movilidad, por lo que evitamos los efectos indeseables de la falta de movilidad que se asocian a la epidural. Por lo tanto, si decides utilizar la epidural, es una buena estrategia para ayudar en el control del dolor. Pregunta si tu hospital dispone de walking epidural".

Cristina González Hernández, matrona.