Desarrollo feto semana 16: El bebé no para de moverse
Empieza a tener reflejo de prensión y coge su propio cordón umbilical
Si hasta ahora lo importante era que los órganos del bebé se formaran correctamente, a partir de la semana 16 de embarazo el desarrollo del feto se centra en una misión importantísima: crecer y crecer. Ahora el niño mide alrededor de 11 centímetros desde la coronilla hasta el coxis y pesa entre 80 y 100 gramos. Y no para de moverse dentro del aún espacioso útero materno.
Cómo se desarrolla el bebé en la semana 16 de embarazo
? El feto es ahora mucho más activo: mueve sin trabas piernas y brazos, lo que quiere decir que su sistema muscular está más evolucionado. Son movimientos que se pueden ver a través de la ecografía. Tú, sobre todo si es tu primer bebé, no los notarás aún. Tendrás que esperar unas pocas semanas para notar esas primeras pataditas. De todas formas, siguen siendo movimientos involuntarios, aunque el sistema nervioso empieza a funcionar y el cerebro controla algunos movimientos.
- “Los movimientos fetales en la primera mitad de la gestación son más bien reflejos”, explican la Dra. Raquel Mula, especialista en Alto Riesgo Obstétrico, y el Dr. Gerard Albaigés, especialista en Medicina Fetal, ambos de Dexeus Mujer.
? Prueba de ello es que empieza a tener el reflejo de prensión. Si su manita se topa con el cordón umbilical quizás lo agarre y lo apriete. Pero eso no tiene porque preocupar a la madre: no tiene fuerza suficiente como para comprometer el sistema circulatorio del cordón.
¿Cómo es el cordón umbilical?
“El cordón umbilical es una estructura que une al feto con la placenta durante el embarazo, y ambas estructuras permiten la necesaria conexión de madre y feto. Se inicia en la región umbilical del feto y llega hasta la cara fetal de la placenta, tiene forma de tubo y por su interior transcurren dos arterias y una vena, denominados vasos umbilicales. Por ellos fluye la sangre encargada de transportar oxígeno, nutrientes y demás elementos necesarios para el adecuado desarrollo fetal, y después llevar de vuelta hacia la circulación materna el dióxido de carbono y sustancias de deshecho del metabolismo fetal. Su característica estructura helicoidal no es caprichosa, sino que cumple una importante función. Las arterias, de paredes más gruesas, forman espirales alrededor de la vena, que ocupa el lugar central. Estos vasos están recubiertos por un tejido que les protege de la compresión externa y les da soporte, llamada gelatina de Wharton”.
Dra. Elisa García, especialista en Obstetricia y Ginecología en el Hospital Clínico San Carlos (Madrid)
? Su cabeza ya está bastante erguida. Aunque los párpados siguen cerrados el globo ocular se mueve y en la ecografía es posible distinguir el cristalino. Su piel sigue siendo muy fina y empiezan a formarse el sentido del tacto. Este es el más madrugador, aparte de ser el más extenso, dado que abarca todo su cuerpo.
? En las yemas de los dedos de la mano aparecen el boceto de espirales y arrugas que se convertirán en las huellas digitales. Y en los pies empiezan a crecerle las uñas de los dedos.
Qué siente la madre en la semana 16 de embarazo
En el embarazo, los elevados niveles de estrógenos y progesterona estimulan la producción de melanina, la sustancia que se encarga de oscurecer la piel, normalmente para protegerla de los rayos ultravioletas del sol. Pero también son los responsables de la llamada línea alba, y que suele aparecer a partir de esta semana, una línea oscura que va del ombligo al pubis y que divide la tripa en dos. No hay que hacer nada y mucho menos aplicar cremas despigmentantes: desaparece sin más tras el parto.
Un consejo para alimentarte mejor
Las nueces alimentos muy calóricos, pero ricos en omega 3 imprescindibles para el desarrollo del cerebro del bebé. Tómalas de forma moderada, pero incluye una o dos todos los días en tu dieta, en ensaladas o como tentempié.
Un consejo para aliviar molestias
Muchas mujeres a medida que avanza el embarazo y la tripa crece experimentan fuertes dolores de espalda, ciática… Para prevenirlos conviene fortalecer la musculatura con ejercicios suaves adaptados al embarazo como la natación.
“Muchos estudios han demostrado que el ejercicio en el embarazo no solo es beneficioso para la mujer, sino que también lo es para el bebé. De entre los beneficios podemos destacar: mejora la condición cardiovascular, se modera la ganancia de peso, mejora las digestiones, mejora la condición física, la mujer llega mejor al parto y la recuperación posparto es más rápida. Incluso aunque nunca haya realizado actividad física, la mujer embarazada se va a beneficiar de todo lo que aporta el ejercicio, siempre y cuando sea supervisada por personal cualificado y tenga el visto bueno de la matrona o ginecólogo. Los deportes aeróbicos de bajo impacto son beneficiosos como el que se practica en la piscina, la elíptica, caminar. También lo son los específicos para preparar el cuerpo de la mujer, como el pilates o yoga prenatal, la esferodimania…”.
Sara Cañamero de León, matrona de Maternatal.
Cómo se forma la visión del bebé
La vista de tu bebé
Los percentiles fetales
