¿Son seguras las vacunas para los lactantes?
Imágenes impactantes con recién nacidos gravemente afectados por enfermedades que casi habían desaparecido gracias a las vacunas y alertas de las autoridades sanitarias frente al fuerte aumento de contagios en muchos países por la negativa de los padres de vacunar a sus hijos han puesto el foco de atención sobre las vacunas, su eficacia y su seguridad.
El movimiento antivacunas, integrado por padres que cuestionan la seguridad de las vacunas, a las que consideran peligrosas para la salud, incluso causantes de enfermedades y trastornos en los niños, basándose en teorías conspirativas y en corrientes seudocientíficas apoyadas por algunos famosos, se ha extendido por muchos países y está poniendo en riesgo la salud pública. Pero, ¿qué hay de cierto en estos ataques? ¿Son seguras las vacunas para los recién nacidos?
Vacunas y recién nacidos
Las vacunas contra la viruela y la fiebre amarilla son las únicas que pueden dañar al bebé si se administran durante el periodo de lactancia, según un reciente estudio realizado por investigadores de Estados Unidos y publicado en la revista ‘Breastfeeding Medicine’. El resto son totalmente seguras y recomendables, incluso cuando se trata de edades tempranas.
Vacunas contra la gripe, difteria, tosferina, tétanos, varicela, sarampión, paperas y rubéola, incluidas en los calendarios de vacunación de los bebés, fueron analizadas en este informe.
Los investigadores también revisaron otras vacunas para factores de riesgo como la hepatitis A y la hepatitis B y otras especiales contra el cólera, la fiebre amarilla, la viruela, la rabia o la fiebre tifoidea.
No se encontró ningún riesgo asociado a la administración de estas vacunas en la lactancia. Incluso destacaron que la mayoría de las vacunas, incluida la del sarampión que causa tanta polémica en la actualidad, aportan beneficios tanto para las madres como para los bebés.
Entre estos efectos positivos destacan la transferencia al niño de anticuerpos de la madre (cuando es ella la que recibe la inmunización) y una mayor respuesta de anticuerpos y menos fiebre después de la vacunación en los niños.
Vacunación segura y recomendable para madres y para bebés
Los expertos han sido muy claros en sus conclusiones: “No solo no hay daño en la administración de las vacunas de rutina a las madres que amamantan, sino que se puede y se debe incluir a las madres lactantes en cualquier campaña de vacunación de emergencia contra el sarampión, como la reciente emergencia declarada por el Departamento de Salud de la ciudad de Nueva York.”
La propagación de enfermedades que ya parecían controladas, como el virus del sarampión, ha puesto en alerta a las autoridades sanitarias tanto en Estados Unidos como en Europa.
La amenaza contra la salud mundial de los antivacunas
La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala la desconfianza en las vacunas como una de las diez grandes amenazas mundiales para la salud en 2019. Gigantes tecnológicos como Facebook y YouTube han anunciado medidas para controlar los contenidos antivacunas ante su proliferación en las redes sociales basándose en ‘fake news’.
Las autoridades de Nueva York proponen eliminar cualquier excepción al programa de vacunaciones, incluso la que alude a motivos religiosos, como ya han hecho los legisladores en California. El gobierno neoyorquino declaró un estado de emergencia de 30 días a finales de marzo para prohibir el acceso a espacios públicos de los menores sin vacunar con multas de hasta 500 dólares ante el alto número de contagios, de los que se responsabiliza a la comunidad judía ultraortodoxa de Brooklyn y a otros grupos antivacunas como Peach, que sostienen que las vacunas no serían aptas para judíos al contener “sangre de mono, rata y cerdo”.