Dormir menos de 7 horas en el embarazo afecta al bebé
Dormir y descansar en el embarazo es muy importante. Tu organismo en el embarazo está haciendo un tremendo sobreesfuerzo. Pero a medida que la tripa crece dormir es más complicado y a menudo el sueño se ve interrumpido por la incomodidad de la barriga y las frecuentes ganas de ir al baño.
Un nuevo estudio realizado por la Universidad Médica de Anhui, publicado en el Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism, señala que las mujeres embarazadas que duermen menos de siete horas podrían tener un mayor riesgo de diabetes gestacional y de que sus hijos presenten retrasos en su desarrollo neurológico. Este patrón de sueño reducido, conocido como “duración corta del sueño” (DCS), afecta aproximadamente al 40% de las mujeres durante la gestación.
El impacto de la falta de sueño en el desarrollo infantil
La investigación analizó a más de 7.000 parejas de madre e hijo en tres hospitales chinos, y examinaron a los pequeños desde los seis meses hasta los tres años de edad. El estudio detectó que los niños cuyas madres dormían menos de siete horas por noche presentaban mayores probabilidades de retrasos en áreas clave del desarrollo neurológico, como el desarrollo cognitivo, las habilidades motoras, el lenguaje y las interacciones sociales. Estas áreas son fundamentales para el aprendizaje y el comportamiento en los primeros años de vida.
El estudio también analizó los niveles de péptido C en la sangre del cordón umbilical, indicador que refleja la secreción de insulina fetal, sugiriendo que la dormir pocas horas puede afectar al metabolismo de la glucosa de la madre e influir en el desarrollo neurológico del pequeño.
“Este estudio destaca la necesidad de controlar la salud del sueño durante el embarazo. Al arrojar luz sobre la conexión entre el sueño materno durante el embarazo y el desarrollo neurológico de los niños, nuestro estudio proporciona a las familias conocimientos que pueden dar forma a hábitos de embarazo más saludables y contribuir al bienestar de la próxima generación”, afirma el autor principal del estudio, Peng Zhu, de la Universidad Médica de Anhui. “Mejorar los hábitos de sueño durante el embarazo puede prevenir el riesgo de problemas en el desarrollo neurológico en los niños”, añade Peng Zhu.
Consejos para mejorar el sueño durante el embarazo
1. Utiliza un cojín para estar más cómoda
A medida que el embarazo avanza, tu tripa aumenta y encontrar una posición cómoda para dormir puede ser difícil. Usa cojines o almohadas especiales para embarazadas o coloca una entre tus rodillas, otra bajo el abdomen y una más para apoyar tu espalda. Dormir de lado, especialmente sobre el lado izquierdo, es ideal ya que mejora la circulación sanguínea hacia el útero y el bebé.
2. Adapta tu dieta para evitar molestias nocturnas
Durante el embarazo, el reflujo, el ardor o la acidez estomacal son comunes y pueden interferir con el sueño. Para reducir estos síntomas, cena por lo menos dos horas antes de acostarte y opta por alimentos ligeros y de fácil digestión. Evita alimentos picantes, fritos o con alto contenido de grasa. Si te da hambre más tarde, toma un yogur, un vaso de leche o una tostada.
3. Evita las siestas largas o muy tarde
Aunque te sientas cansada durante el día, intenta limitar las siestas a no más de 30 minutos. Las siestas prolongadas pueden dificultar que concilies el sueño por la noche.
4. Controla la frecuencia de las idas al baño
La necesidad de orinar frecuentemente es un síntoma común en el embarazo, especialmente durante la noche. Para evitar interrumpir tu sueño, reduce el consumo de líquidos un par de horas antes de acostarte. Si debes levantarte para ir al baño, trata de mantener la luz tenue para no interrumpir por completo tu ciclo de sueño.
5. Alivia los calambres
Muchas mujeres embarazadas experimentan calambres en las piernas durante la noche, lo que puede interrumpir el sueño. Para prevenirlos, estira las piernas antes de acostarte. Si el dolor es frecuente, consulta con tu médico.
6. Relájate antes de dormir
El embarazo puede generar ansiedad, especialmente a medida que se acerca el parto. Desarrollar una rutina relajante antes de acostarte, como leer un libro, tomar un baño tibio o practicar yoga prenatal, puede ayudarte a relajarte y preparar el cuerpo para dormir. Evita el uso de pantallas antes de dormir, ya que la luz azul de los dispositivos puede interferir con tu capacidad de conciliar el sueño.