Mareos, cefalea, náuseas y vómitos en el primer trimestre
Suelen desaparecer por sí solos a medida que la gestación avanza
En el primer trimestre del embarazo, y muy especialmente, en las primeras semanas de gestación, muchas embarazadas experimentan molestos síntomas, como los mareos, cefaleas o dolores de cabeza, y náuseas y vómitos.
Mareos
Son frecuentes en el primer trimestre del embarazo y a veces incluso pueden aparecer antes de que la mujer sepa que está embarazada. Pueden persistir a lo largo de todo el embarazo hasta el momento del parto.
Se caracterizan por sudoración, palidez de la piel y visión borrosa, que a veces se acompaña de desmayo con pérdida de conocimiento. Aunque los mareos no suelen ser graves, si son muy escandalosos para las personas que los presencian y más tratándose de un mujer embarazada, por lo que siguen siendo motivo de traslado a urgencias.
Las causas del mareo son la hipotensión y/o la hipoglucemia. La hipotensión se debe a una disminución transitoria de la tensión arterial sanguínea y puede ocasionar desvanecimiento. Ocurre con frecuencia al levantarse de la cama o de una silla y se denomina "hipotensión postural". En estos casos es importante tomar la tensión a la gestante y si está baja, administrar un café o un refresco de cola.
Es importante recordar que a la hora de tumbarse, la embarazada tiene que hacerlo de lado, preferiblemente del izquierdo, evitando hacerlo "boca arriba" para no presionar con el útero los vasos sanguíneos (aorta y vena cava) que se localizan en la espalda.
La compresión de la vena cava hace que llegue menos sangre al corazón, con lo que se produce una disminución de la presión arterial del 30% y un reducción del gasto cardiaco. A la hora de incorporarse de la cama, hay que evitar los movimientos bruscos, rotar hacia un lado, sentarse despacio y luego ponerse de pié.
La hipoglucemia, la otra causa de mareos, se debe a una disminución de los niveles de azúcar en sangre. Si tras un mareo, la tensión es normal, probablemente se deba a una hipoglucemia. En este caso, la gestante debe tomar algo dulce. El refresco de cola incluye cafeína y azúcar por lo que se aconseja en casos de mareo.
Es importante incidir en que la embarazada debe hacer cinco comidas al día para evitar los descensos de azúcar en sangre.
Cefalea
El dolor de cabeza es muy frecuente en el primer trimestre de embarazo y se debe principalmente al aumento de los niveles de las hormonas sexuales como el estrógeno y la progesterona. Puede aparecer aislado o acompañado de mareos. En el caso de que la cefalea se acompañe de mareos las causas pueden ser la hipotensión o la hipoglucemia ya comentadas. La cefalea aislada es más frecuente en mujeres que ya padecían cefalea previamente al embarazo, aunque también puede aparecer en mujeres que no son propensas a la misma. El estrógeno, la hormona sexual que está aumentada en el embarazo, produce vasodilatación y congestión sanguínea que agudiza la cefalea preexistente. El tratamiento más adecuado es el paracetamol en dosis de 500 mg, 650mg o 1 gr. cada 8 horas según la intensidad de la cefaleas.
Náuseas y vómitos
Aparecen en el primer trimestre de la gestación siendo más intensos por la mañana. Su origen permanece aún desconocido aunque el elevado nivel de una hormona llamada gonadotropina coriónica puede afectar al centro del vómito que se encuentra en el tronco cerebral. Al mismo tiempo, el aumento de la progesterona produce relajación de los músculos del aparato digestivo, haciendo que las digestiones sean más lentas. A veces las náuseas y más frecuentemente los vómitos, van acompañados de dolor tras el esfuerzo de vomitar dejando la región del esófago dolorida tras el paso de comida con jugos gástricos ácidos. En estos casos la toma de ranitidina o almagato en pastilla o sobres, puede paliar el escozor dejado tras el vómito o el esfuerzo nauseoso.