Cómo lidiar con la mala circulación y el calor en el embarazo
Una de las preguntas más comunes en la consulta del ginecólogo es cómo mejorar su circulación sanguínea estando embarazada en verano. La gestación produce un enlentecimiento del torrente circulatorio especialmente en los miembros inferiores y un aumento de la presión intraabdominal.
Las molestias son muchas: pesadez en las piernas, hormigueos que no cesan, incluso puede ocasionar sensación pulsátil, que llega a ser dolorosa… Y, no sólo eso, también pueden aparecer las antiestéticas arañas vasculares, e incluso un síndrome varicoso importante, que pueden mitigarse tras el parto, pero difícilmente va a desaparecer durante el embarazo.
Cómo prevenir y aliviar la mala circulación
Además de la tendencia de las embarazadas a la mala circulación, también hay personas que tienen una predisposición genética a padecer este mal. Tanto para las mujeres que ya padecen la mala circulación sanguínea, como para aquéllas que se han encontrado la sorpresa en su embarazo, lo más importante es poner en práctica medidas de prevención y alivio de los síntomas:
- Cuidado con el peso. Es muy importante no excederse en la ganancia de peso en el embarazo. Es difícil, lo sabemos. Sólo podemos abusar de los alimentos de la dieta mediterránea, ricos en proteínas, verduras y frutas, evitar el consumo de fritos y alimentos grasos, que aportan poco a nuestra nutrición, pero muchos números a la aguja de la báscula. Tenemos que buscar nuestro bienestar, no sólo la estética.
- Mucha agua sin gas. Bebe mucha agua y evita los productos gaseosos. Así disminuirás la retención de líquidos y mejorarás la circulación sanguínea.
- Caminar, nadar, bicicleta… El ejercicio físico aeróbico es fundamental, puesto que no sólo te hará sentir bien, sino que permitirá a que tu retorno venoso esté favorecido y facilitado. Por consiguiente, camina, nada o haz bicicleta, que todo ello te va a ayudar a encontrar más ligeras tus piernas.
- Ropa holgada. Evita la ropa ajustada y que te de gran acúmulo de calor, porque todo ello va a hacer que tu circulación vaya a peor.
- Medias de compresión. Sólo son recomendables si la embarazada las aguanta. En algunas ocasiones, se recomienda el empleo de medias que incrementan la compresión en las piernas y reduce la sensación de malestar, al igual que el riesgo de aparición de nuevas varices y/o arañas vasculares. Pero es cierto que en esta época de calor hay mujeres que no pueden llevar este tipo de prendas.
- Cuídate mucho en casa. Cuando estés en tu domicilio, debes intentar cuidarte al máximo… es tu momento del día. Intenta seguir estos tres consejos sencillos de realizar y que pueden ayudarte mucho en tu día a día:
- Poner los pies en alto.
- Darte un masaje con gel frío que mejora mucho los síntomas.
- Las duchas de agua fría.
- Masaje de piernas. También puedes acudir a un centro de especialistas en Fisioterapia que pueden mejorarte la circulación de las piernas mediante masaje.
- Medicación con receta médica. Por último, también existe medicación para mejorar los síntomas de la mala circulación sanguínea de los miembros inferiores a aquellas mujeres que presentan casos importantes que limitan su quehacer diario. Dichos productos son los flebotónicos: mejoran el tránsito del torrente sanguíneo pero que siempre deben ir prescritos por un especialista.
Lo más importante para evitar los molestos síntomas de la mala circulación sanguínea es cuidarse e intentar llevar una vida lo más sana y activa posible.