Cuidados del periné en el posparto
Cuidados del suelo pélvico en las primeras semanas después del parto
Más que los nueve meses de embarazo, el parto resulta muy agresivo para el suelo pélvico de la mujer, por la tremenda presión que se ejerce sobre él en ese momento.
Para una adecuada recuperación de la musculatura del periné o suelo pélvico, y evitar así una futura incontinencia urinaria, tenemos que comenzar sus cuidados desde el posparto o puerperio inmediato y de una forma integral y ser constantes en ellos.
Aunque siempre habrá un antes y un después del parto (especialmente si fue vaginal), mantener un periné fuerte, flexible y con buen tono puede conseguirse después de dar a luz. Para ello debes seguir una serie de consejos que te detallamos a continuación.
Cuidados del periné en las primeras 48 horas
- Cuida la postura que adoptes, ya sea de pie, sentada, amamantando…
- Es recomendable la crianza biológica (que entre otras cosas incluye dar el pecho reclinada) para no hacer presión sobre el periné.
- Evita en lo posible cargar peso de pie (como, por ejemplo, cargar al bebe).
- No realices abdominales hipopresivos bajo ningún concepto, porque aumentan la presión dentro del abdomen, lo que va en contra de tu suelo pélvico.
- Toma medidas contra el estreñimiento en el posparto, como alimentos ricos en fibra y aporte de líquidos.
- La matrona valorará la sensibilidad del tu periné y si sientes dolor en la zona.
- Conviene que te mires con un espejo y toques el periné lo antes posible, para integrar el suelo pélvico a tu esquema corporal.
- Como cuidados específicos pelviperineales, cuando hay inestabilidad pélvica -que se produce debido a una hormona que se segrega en el embarazo, la relaxina- algunos fisioterapeutas recomiendan una cincha o faja sacroiliaca, sobre todo la primera semana.
- Pero debes evitar las fajas abdominales posparto, salvo indicación en casos muy concretos. Su uso aumentaría la presión en el abdomen y como consecuencia hacia el periné.
Cuidados del periné en la primera semana posparto
- Puedes comenzar la actividad perineal de forma gradual según el dolor.
- Si hay suturas perineales, sigue las recomendaciones sobre autocuidados que te indicará tu matrona.
- Mantén una higiene adecuada pero no un lavado excesivo. Convendrá que la zona esté aireada pero, no utilices secadores.
- Toma medidas para evitar el estreñimiento.
- No te sientes sobre flotadores.
Periné: Cuidados entre la segunda y octava semana posparto
- Si aún no has mirado tu periné, conviene que lo hagas. Esto te ayudará a reintegrarlo a tu esquema corporal; y si hay cicatriz, a reconciliarte con ella.
- Puedes iniciar los ejercicios de suelo pélvico, los ejercicios de Kegel, siempre que los hayas sabido hacer antes del parto.
- Sigue siendo recomendable la lactancia materna, que además de todos sus beneficios para madre e hijo, evita hacer presión sobre el periné.
- Cuando estés de pie, procura estar en movimiento (balanceo, como acunando al bebe).
- No utilices faja abdominal.
- Si el periné está integro, puedes masajearlo con un aceite nutritivo conseguirás mejorar la oxigenación del suelo pélvico y su elasticidad.
- Si has tenido un desgarro o una episiotomía, una vez cicatrizado, puedes iniciar el masaje perineal, para que la cicatriz no quede indurada y a la larga no te cause molestias en determinadas posturas de la vida diaria, ni durante las relaciones coitales
- Puedes realizarlo después de la ducha, lubrica los dedos con un aceite esencial. Focaliza el masaje sobre la cicatriz. Notarás como según lo vas haciendo: la cicatriz se ablanda y deja de molestar. La matrona te puede indicar como realizarlo, no dudes en consultarla.
- Puedes utilizar como lubricante aceites esenciales, como por ejemplo el aceite de almendras dulces. Lo ideal es que esté templado; puedes aplicarlo en la vagina y en el periné.
Cuidados del periné a partir de los dos meses
Las fibras tónicas del periné vuelven a su ser. Es el momento para hacer una valoración pelviperineal y de la musculatura abdominal por un profesional. En caso de presentar molestias o algún tipo de incontinencia no dejes de consultar con tu médico o matrona. En algunos casos será necesario tratamiento rehabilitador por fisioterapeutas urogenitales.
A partir de los dos meses puedes iniciar gimnasia abdominal hipopresiva en posición decúbito supino y de forma progresiva. La gimnasia hipopresiva consiste en realizar ejercicios, en este caso indicados para fortalecer el suelo pélvico, a través de diferentes posturas, pero con un ritmo lento y en fase de apnea, es decir, sin oxígeno, con los pulmones vacíos. Lo mejor si no la has realizado antes es dejarte orientar por un monitor.