Cómo preparar tu embarazo de forma saludable
Las madres cuentan su experiencia
Una gestación saludable comienza antes de quedarte embarazada. En realidad comienza mucho antes de pensar en la maternidad. Hace una generación, los progenitores no programaban una cita con el médico para hablar sobre sus planes de concepción. No obstante, hoy cada vez más las parejas realizan un chequeo a su salud antes del embarazo.
Planificarlo reporta beneficios tanto a la madre como al niño. El ginecólogo evalúa el estado de las madres y la orienta y le da unas pautas, en una visita preconcepcional. Complementar la alimentación con ácido fólico (tomar 400 microgramos diarios ayuda al correcto desarrollo del cerebro y la médula espinal del feto) y yodo, practicar ejercicio, comer sano, dejar de fumar… son hábitos saludables importantes para afrontar en las mejores condiciones los nueve meses de espera hasta el nacimiento.
Lucía: “Vida sana, no engordar mucho y beber mucha agua"
Sin embargo, los embarazos no siempre se planifican, como Lucía (37 años), alma máter del blog "Baballa. Cómo ser madre trabajadora y no morir en el intento" (http://www.baballa.com): "Planificar no, simplemente llegó un momento en el que mi marido y yo decidimos tener un hijo y nos pusimos a ello".
Con el primero, que tuvo a los 30 años, tardó bastante, "de hecho en el momento en el que pensé que me pasaba algo y que tenía que ir al médico fue cuando me quedé embarazada". Con el segundo, sin embargo, "no tenía ninguna prisa y me quedé enseguida. Resultado: mis hijos se llevan menos de dos años de diferencia".
Lucía no hizo nada distinto de cuando no estaba embarazada, como "comer de forma sana, no engordar demasiado y beber mucha agua". Aunque confiesa que quizá comió más chocolate porque le chifla "y era la excusa perfecta, eso de comer por dos, que sé que no se debe hacer, pero yo te aseguro que lo hice".
La vida de esta mamá bloguera continuó "como si no estuviese embarazada", tanto –dice– "que si no llega a ser por el sueño que tenía al principio y el insomnio que tuve después ni me enteré. Hacía vida normal hasta que empecé con contracciones antes de tiempo y tuve que tomarme todo de manera mucho más relajada", cuenta Lucía.
Con el segundo embarazo ni se enteró de que estaba embarazada y estuvo trabajando y haciéndose cargo de su otro hijo de 18 meses hasta el final. "Yo creo que decides tener hijos y los intentas tener, porque, que yo sepa, tampoco ninguna de mis amigas se preparó para el embarazo", afirma.
A pesar de que Lucía no cambió sus hábitos, no faltó a sus visitas con el ginecólogo. "Debería ser obligatorio por el bien de la personita que llevas dentro, ¿no?" Ella iba todos los meses a ver cómo estaba el pequeño y a que el ginecólogo controlase que todo estaba bien.
Gloria: "Tomé ácido fólico antes de quedarme embarazada"
En cambio las amigas de Glòria Vives y ella misma sí han planificado su embarazo. Ilustradora y autora del libro "40 semanas. Crónica de un embarazo", antes de quedarse embarazada tomó ácido fólico.
La primera vez que se quedó embarazada "tuve un aborto y lo pasé mal". Así que el embarazo de su primera hija, con 30 años, "lo deseé mucho y estaba muy pensado pero no hice nada más especial". "Soy muy prudente con la salud e intento hacer una vida los más saludable posible".
Ahora, Glòria está embarazada de nuevo de su segunda hija y, además de tomar ácido fólico, también ha cambiado algunos hábitos: "Dejé de correr para no poner más presión en mi suelo pélvico, dejé de ir a trabajar en bici porque hay mucha subida y se me acaba el aire y creo que esto no es bueno para el bebé. También amplié mis clases de yoga para preparar el parto y procuré coger pocos pesos -con otra hija mayor es difícil- para no cargar las abdominales".
Además, ha modificado su forma de alimentarse, procura comer más proteínas porque no come carne, aunque reconoce que le apetecen más comidas dulces y se tiene que controlar.
"La verdad es que el embarazo me lo controla la comadrona y si hay algún problema, lo comenta con el ginecólogo... Pero todas las dudas de alimentación y hábitos las comparto en el lugar donde preparé el parto la primera vez, una cooperativa de salud que acompañan el embarazo desde distintos puntos de vista", explica Glòria, quien en la novela gráfica "40 semanas" relata su experiencia durante su primer embarazo y parto, "con un lenguaje tragicómico, muy personal y sin censuras", cuenta en su blog. (http://gloriavivesxiol.blogspot.com)
Bloguera de "Mi gremlin no me come"
"Fui al ginecólogo desde el primer momento y tomé un suplemento de ácido fólico"
La autora del blog: "Mi gremlin no me come" (http://migremlinnomecome.wordpress.com) pensó en tener hijos desde que se casó aunque pasó algo de tiempo "hasta que se dieron las circunstancias adecuadas". "Tener un hijo –dice– es una decisión muy importante que realmente te cambia la vida". Su "despertador biológico" empezó a sonar un verano mientras hacía el Camino de Santiago: "Creo que mi marido no salió corriendo porque no le daban más de sí las piernas ¡no dejé de hablarle sobre ello en todo el camino!".
Es farmacéutica y dedica bastante tiempo de su actividad profesional a dar consejos para un embarazo sano. "Es algo que me parece importante ya que muchas mujeres piensan que dejando de fumar y beber, es suficiente. Si bien esto es cierto, hay otros muchos factores que deben tenerse en cuenta y a veces, por desconocimiento o dejadez, se pasan por alto", explica.
Antes de quedarse embarazada tomó un suplemento de ácido fólico y controló la alimentación para no comenzar el embarazo con exceso de peso. "Fui al ginecólogo desde el primer momento, el cual me dio una serie de medidas higiénico-dietéticas para seguir a lo largo del embarazo". También sus amigas planifican su embarazo. "Son mujeres preocupadas por su salud y más aún por la de sus futuros bebés. Si alguna se despista... ¡le suelo insistir bastante!", insiste esta mamá bloguera.
Sarai: "Muchas frutas y verduras más ácido fólico"
Sarai (28 años), (@saraillamas http://saraillamas.blogspot.com), bloguera de "Yo soy madre y tú ¿qué superpoderes tienes?", fue madre a los 27 años, una decisión tomada en pareja en la que dejaron que el factor sorpresa entrase en juego. "No queríamos vivir con la ansiedad de 'quedarnos embarazados' todos los meses. Y la verdad que esta fórmula dio un buen resultado ya que al segundo mes de intentarlo me quedé embarazada". Antes de concebir no fue al ginecólogo para una consulta preconcepcional y no cambió demasiado sus hábitos, puesto que ya llevaba una vida sana anteriormente. "Trabajé en un gimnasio, así que el ejercicio físico no me faltaba. Y mi dieta era primordialmente vegetariana, con muchas frutas y verduras. Lo que hice fue integrar a mi dieta un suplemento de ácido fólico", explica Sarai. Una vez embarazada, "devoré revistas, libros y webs donde se hablaba de cómo llevar un embarazo de la manera más sana posible. Era algo que me interesaba tanto por mí como por la personita que habitaba en mi interior. Sabía que cuanto más cuidaba mi salud más cuidado y protegido iba a estar él". Algunas de sus amigas también preparan con antelación su embarazo, aunque la mayoría "deja que les coja por sorpresa". Lo mejor es, sin duda, prepararlo a conciencia.
Bloguera de "MamáenAlemania"
"No acudí al ginecólogo antes, pero hice vida saludable"
La bloguera MamáenAlemania (@mamaenalemania http://mamaenalemania.blogspot.com.es) era de las que juraba que nunca se casaría y que jamás tendría hijos, y "fue conocer a mi marido y en cuanto lo vi, empecé a oír mi reloj biológico. Planificó a medias su embarazo: "Queríamos un niño pero sabíamos que no era un "buen momento", así que decidimos dejar a la naturaleza seguir su curso y a ver qué pasaba. No sabíamos que iba a funcionar tan rápido, pero a la primera me quedé embarazada".
Fue madre por primera vez a los 24 años. Ahora tiene 30 y tres hijos. Ella tenía claro lo que debía cuidarse, por que "intuitiva y culturalmente sabemos más o menos lo que tenemos que hacer. De todas formas, en cuanto pasas por el ginecólogo y se lo cuentas a tus familiares y amigos, te inundan de prescripciones, consejos…".
Sin embargo, MamáenAlemania no acudió al ginecólogo antes de quedarse embarazada porque el bebé "no fue buscado en el sentido estricto de la palabra". Fue al médico en cuanto se enteró de que estaba embarazada. "Al llegar a una edad y dependiendo del tiempo que lleven buscando, sí que veo que se preparan más: Dejan de fumar, de beber, empiezan una dieta más saludable, toman ácido fólico…".
Isabel: "El primer embarazo me pilló desprevenida"
Isabel, de 41 años, (http://www.mividaconhijos.com/) tampoco fue al ginecólogo antes de quedarse embarazada por primera vez con 32 años, porque "no lo planifiqué, de hecho vino muy rápido y nos pilló por sorpresa, pero sí el segundo y el tercero, en el que traté de tener 'puntería' para que viniera por fin la niña! y sí, acertamos y vino!".
El primer embarazo llegó tan pronto que la pilló desprevenida. "Algunas amigas mías sí que han sido más previsoras", afirma la autora del blog Mi vida con hijos. "Siempre he tenido una vida muy saludable, así que prácticamente no tuve que cambiar nada cuando decidí quedarme embarazada, sí empecé a nadar más y a hacer más deporte".
Isasaweis: "No fumo, no bebo alcohol y como sano"
Isasaweis (http://www.isasaweis.com/) es una de las videoblogueras (http://www.youtube.com/user/isasaweis) más populares de España, con mil y un consejos sobre maquillaje y cocina. Fue madre hace un año, a los 34. Para ella los embarazos "no se planifican, o más bien, aunque lo hagas, ¡llegan cuando quieren! Pero sí, lo estábamos buscando, teníamos muchas ganas de ser padres", confiesa.
Su marido y ella llevaban más de seis años juntos, varios de ellos conviviendo y decidieron casarse. "A partir de ahí, y con la estabilidad (relativa) laboral que teníamos, creímos que cualquier momento sería bueno para ser padres. Así que nos pusimos a buscarlo, y aproximadamente un año después me quedé embarazada.
Ella no tuvo que cambiar sus hábitos antes, durante y después del embarazo: "No fumo, no bebo alcohol, y como de forma sana y equilibrada. Hago un poco de ejercicio, no soy de gimnasios la verdad, pero sí de salir a pasear, a la naturaleza, hacer caminatas, andar en bici, nadar un poco... Así que lo he tenido fácil", afirma.
Es más, para Isasaweis los hábitos saludables deberían seguirse "para una vida sana, no necesariamente para un embarazo". Ella fue al ginecólogo antes de quedarse embarazada y luego siguió las pautas que la iban dando en su centro de salud durante el embarazo. Entre ellas, ir a clases de preparación al parto, al igual que sus amigas.