Test embarazo de temperatura basal

El test de la temperatura basal se fundamente en las variaciones de temperatura del organismo de la mujer según el momento de su ciclo menstrual. También llamado método Ogino (por su descubridor), la mujer debe registrar su temperatura corporal a diario, tomada siempre a la misma hora, para saber si se encuentra en la ovulación o en el periodo infértil.

Cómo saber si estás embarazada con la temperatura basal

Una fórmula mucho más tradicional de saber si se está embarazada es la aplicación del método de temperatura basal. Se fundamenta en el hecho de que la temperatura corporal es más baja al inicio del ciclo menstrual, durante la ovulación, y se eleva en el periodo infértil de la mujer. Por tanto, puede aportarnos información sobre si se ha producido o no un embarazo: si la temperatura más alta (por encima de los 37 grados) se registra durante más de 18 días, resulta muy probable que  el óvulo hay sido fecundado. 

Para aplicar este método es importante una rutina todos los días:

• Tomarse la temperatura al despertarse, antes de levantarse de la cama y sin hacer ningún tipo de esfuerzo físico. Se recomienda haber dormido un mínimo de seis a ocho horas; de lo contrario hay que descansar al menos durante una hora antes de tomarla.
• Realizarla cada día a la misma hora para evitar registros de temperaturas diferentes y en el mismo lugar. Se recomienda en la boca, en el ano o la vagina, ya que la medición en la axila puede ser inexacta.

Consulta obligada al ginecólogo

Tanto si las pruebas nos dan negativas, y el ciclo menstrual sigue sin aparecer, como si dan positivas o creemos que nuestra temperatura basal indica que existe embarazo, el siguiente paso será acudir al ginecólogo para que realice un exhaustivo examen que confirme la situación. Este especialista realizará un análisis de sangre y una ecografía vaginal que nos sacarán de toda duda.

La probabilidad de embarazo en una pareja que mantiene relaciones sexuales con regularidad es tan sólo del 20 por ciento al mes, según señala un estudio de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO). Así, el tiempo que tarda una pareja sana en concebir un hijo se sitúa en los cinco meses y dos semanas. La edad resulta determinante: una mujer de entre 20 y 25 años tiene entre un 20% y un 25% de probabilidades de quedarse embarazada al primer mes de intentarlo, mientras que a partir de los 30 el porcentaje se reduce al 15% en cada ciclo menstrual.