"Tu leche es medicina para tu bebé"
La leche materna reduce las enfermedades en los grandes prematuros
Si un recién nacido de menos de 1.500 gramos de peso, un gran prematuro, consume al menos 25 mililitros al día de leche materna se reduce el riesgo de enfermedades en sus primeras semanas de vida. Es la conclusión de un estudio dirigido por la profesora Paula Meier y presentado en el IX Simposio Internacional de Lactancia Materna. La investigación, realizada en Chicago, sostiene que a mayor consumo de leche materna, las infecciones en la incubadora se reducen significativamente. Esto significa que mejora la salud de los bebés y el coste por hospitalización de los prematuros en las unidades de cuidados intensivos es menor.
Para que nos lo explique hemos entrevistado a la profesora Paula Meier, Directora de Investigación Clínica y Lactancia, de la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales, Centro Médico de la Universidad Rush (Chicago).
¿Cómo han comprobado los beneficios de la leche materna en prematuros de muy bajo peso?
Tenemos un programa de lactancia materna para bebés prematuros de menos de 1.500 gramos de peso. Hemos estudiado durante cinco años a 430 madres con sus niños prematuros en el Centro Médico de la Universidad Rush, en Chicago. Y hemos comprobado, además, que una mamá puede producir suficiente leche también en estas circunstancias, cuando tiene un gran prematuro en los brazos.
Para que el bebé se beneficie de la leche materna, tenemos que medir la cantidad de leche que toma al día un niño tan pequeño, ya que sus beneficios se notan a partir de los 25 ml de leche materna al día. Esta investigación tiene un coste pero lo compensamos con creces en dos aspectos: los prematuros se alimentan y se desarrollan mejor, se ponen menos enfermos, y eso reduce la factura hospitalaria.
Además, hay que tener en cuenta otros males a los que se enfrentan los grandes prematuros en las UCI, como los problemas pulmonares, por ejemplo, pero hay muchas otras amenazas: septicemia de inicio tardío, enterocolitis necrosante, neumopatía crónica, crecimiento insuficiente o retraso neurocognitivo. Un dato de nuestra investigación: cada 10 ml adicionales de leche materna que reciben los prematuros de muy bajo peso durante los primeros 28 días de vida, reduce en un 19% el riesgo de septicemia de inicio tardío.
¿Cómo se fomenta la lactancia materna del bebé prematuro?
Las unidades de cuidados intensivos donde están ingresados los bebés están abiertas todo el día, no hay horarios fijos para los padres. No trabajamos con leche donada, toda la leche proviene de las propias madres. Creemos que en los bancos de leche materna se pierden nutrientes, porque lógicamente la leche se tiene que tratar antes de que la consuma el bebé. Los médicos dicen a las madres que están en las UCI: "Tu leche es una medicina para tu bebé".
¿Y si la madre no consigue extraerse la leche?
Es importantísimo para estas mamás que haya una o varias personas de apoyo que les digan cómo extraerse la leche con los extractores que les facilitamos en el hospital. Hay un periodo especialmente sensible, los primeros días de la lactancia, en los que es fácil que surjan problemas. Nuestras consejeras se sientan al lado de las madres y les explican cómo utilizar el aparato, les aconsejan si sienten dolor…
Lo más importante, les hacen confiar en que podrán producir toda la leche necesaria para su hijo. No hay mayor alegría para una madre, especialmente para la mamá de un prematuro de muy bajo peso, que poder alimentarle con su propia leche.