¿Para qué sirve el hipo del recién nacido?

Es muy curioso: tu bebé acaba de nacer y notas que empieza a tener algo parecido al hipo durante largos ratos, pero no sabes por qué se produce. Un hipo que quizá ya has notado alguna vez cuando aún estaba en el útero materno. Un estudio realizado por científicos del University College de Londres vincula ahora esta reacción física, el hipo, con el desarrollo cerebral del bebé.

Esta investigación, que ha sido publicada en la revista "Clinical Neurophysiology", observó los escáneres cerebrales de 13 recién nacidos prematuros y a término, que nacieron entres las semanas 30 y 42 de gestación. Se observó que los bebés tienen una gran tendencia al hipo: una media a unos 15 minutos a lo largo del día, lo que supone aproximadamente un 1% de su tiempo. Otro dato curioso es que los bebés con más semanas de gestación tenían menos episodios de hipo, lo que se vincula a un mayor desarrollo del niño y encajaría con la tesis del desarrollo cerebral.

Hipo, relacionado con nuevas conexiones cerebrales

La actividad cerebral de los bebés durante los episodios de hipo fue reveladora para los investigadores: La contracciones del diafragma que provoca el hipo, tenían una respuesta en la corteza cerebral de los pequeños en forma de tres ondas cerebrales, las dos primeras más grandes; la tercera onda produce efectos en el bebé similares a las ocasionadas por un ruido externo. Para los expertos, el procesamiento de la señales multisensoriales que detecta el bebé es de gran importancia para el desarrollo de sus conexiones cerebrales y se cree que le ayudan a controlar los músculos de la respiración.

Además, los autores de este estudio defienden que las patadas que dan los bebés en el abdomen materno pueden estar ayudan a crear su "mapa mental" de su propio cuerpo y sus hallazgos recientes pueden aplicarse también al proceso de los movimientos fetales intraútero. Al nacer, los circuitos que procesan las sensaciones del niño no están completamente desarrollados, por lo que la creación de nuevas conexiones gracias al hipo sería de vital importancia, según afirman los investigadores británicos.