Consejos de higiene íntima en el embarazo

Qué productos son los mejores y cómo prevenir las infecciones

En el embarazo debes prestar mucha atención a tu higiene íntima y seguir unas consejos básicos. Los cambios hormonales que se producen a lo largo de la gestación no solo son los culpables de las náuseas (si las padeces) o de que tu tripa pueda crecer y crecer para que tu bebé crezca dentro de ella entre 36 y 40 semanas.

Las hormonas del embarazo también modifican el pH vaginal, que en la gestación es menor a 4,5. Por eso, la embarazada tiene más riesgo de sufrir infecciones vaginales e irritaciones. Esas alteraciones del pH vaginal hacen aconsejable el uso de jabones específicos para la zona vaginal y quizás cambiar algunos hábitos de vida poco saludables.

"¿Qué productos puedo usar para mi higiene íntima?"

  • Puedes emplear productos de higiene íntima que respeten tu pH vaginal y mantienen el equilibrio vulvovaginal. La higiene íntima con productos inadecuados puede modificar el equilibrio natural de la flora vaginal. Por eso, el pH del producto elegido debe estar entre 3,5 y el 4,5 para no alterar el equilibrio de la mucosa vaginal.
  • Los formulados con extractos naturales, como la Bardana, Camomila o Aloe Vera.
  • Es preferible que no contengan jabones.

Consejos para tu higiene íntima


Consejos de higiene para la embarazada

Lo ideal son los lavados diarios con soluciones específicas (sin detergentes y con componentes calmantes) para prevenir la aparición de vulvovaginitis.   

  • Hay que limpiar la zona perineal de adelante hacia atrás, no al revés, para evitar que bacterias fecales lleguen a la vagina. El lavado de manos antes y después de ir al baño es imprescindible.
  • Seca muy bien la zona, ya que la humedad favorece el crecimiento de hongos.
  • No se recomienda el uso de esponjas y guantes en los lavados vaginales porque son una fuente de gérmenes. Es preferible usar la mano.
  • Usar a diario protectores íntimos, como los salvaslips, deteriora el pH vaginal. El origen está en los materiales, las fragancias y las sustancias químicas usadas en su fabricación.
  • No aplicarse las duchas vaginales, ya que acaban con la flora vaginal normal. El lavado debe ser siempre externo. La zona interna de la vagina no necesita ningún tipo de lavado, dado que se protege a sí misma. Ni tan siquiera tras mantener relaciones sexuales.
  • Tampoco están indicados los desodorantes utilizados para la higiene íntima femenina. El mal olor debido a una infección vaginal solo puede eliminarse con el tratamiento que recete el médico.

Cómo mantener la salud de tu zona íntima


  • Con asear la zona íntima una vez al día es suficiente. Lavarse muy a menudo podría dañar la flora vaginal que te defiende de los gérmenes.
  • Mantén la zona siempre muy seca. Si vas a la piscina o a la playa, no permanezcas mucho tiempo con el bañador mojado.
  • Usa ropa interior de algodón.Si es sintética, que al menos la zona de la entrepiernas sea de algodón.
  • Algunos médicos aconsejan dormir sin ropa interior para evitar humedad en la zona.
  • Quizás con el embarazo notes que la zona se irrita. Quizás se deba al uso de blanqueantes o suavizantes en el lavado de la ropa íntima. Evítalos.
  • Usa prendas amplias. Los pantalones muy ajustados merman la traspiración y pueden favorecer la infecciones.

¿Infección de orina por bacterias o por hongos, como la candidiasis? La Dra. Elisa García te ayuda a diferenciar los síntomas.

Consejos de higiene íntima

¿Sabías que...?

En caso de estar embarazada o haber tomado algún tratamiento antibiótico aumenta el riesgo de infección vaginal. Consulta con tu médico qué puedes hacer para reforzar las defensas naturales de tu organismo.

Se debe consultar al médico en caso de notar flujo anormal, prurito, escozor, sequedad o dolor al orinar.

Higiene íntima en la embarazada: alimentación sana

Cuida tu alimentación

  • La aparición de candidiasis parece relacionarse con las dietas muy ricas en azúcares simples. Limita mucho los dulces, las pastas y los panes elaborados con cereales no integrales o las frutas muy dulces.
  • Consumir yogures (naturales y sin edulcorar o azucarados) con un elevado contenido de fermentos lácticos ayuda a prevenir la aparición de cándida.
  • Puedes comer legumbres, verduras, carnes blancas y pescados

 

Caridad Ruiz
Redactora experta en salud