Consejos para la higiene de tu zona íntima en verano

Cómo prevenir las infecciones en la piscina y la playa

Prevenir infecciones en la piscina

En verano, lo que apetece es estar en la piscina o en la playa para refrescarte. Sobre todo, ahora que con el embarazo tienes un “calor” extra. Por efecto de la progesterona se produce un incremento de la temperatura y además tu cuerpo está trabajando para crear una nueva vida.

Acudir a una piscina o al mar para disminuir ese calor es una de las soluciones. Pero… son ambientes húmedos que junto con las altas temperaturas se convierten en el lugar preferido para las bacterias que provocan infecciones como la cistitis o la candidiasis. En ese ambiente, las bacterias crecen y crecen. En el estudio Warmer Weather and the Risk of Urinary Tract Infections in Women en The Journal of Urology, que se realizó en 2021 afirmaba que la incidencia de infecciones urinarias en las mujeres aumentaban cuando lo hacían las temperaturas y que el clima cálido era un factor de riesgo.

¿Cómo prevenir las infecciones en la piscina y en la playa?


Asea tu zona íntima con un producto específico

Usa productos de higiene íntima con un pH vaginal adecuado y que mantengan el equilibrio vulvovaginal.

  • El pH del producto elegido debe estar entre 3,5 y el 4,5 para no alterar el equilibrio de la mucosa vaginal. La higiene con productos inadecuados puede modificar el equilibrio natural de la flora vaginal.
  • Los formulados con extractos naturales, como la bardana, camomila o aloe vera.
  • Es preferible que no contengan jabones. Ten en cuanta que el ph de tu zona íntima es distinto al del resto de tu cuerpo, por eso para asearte no conviene usar jabones o geles de ducha.

No abuses de la higiene íntima

Un exceso de higiene íntima y las duchas vaginales pueden ser muy contraproducentes. El lavado debe ser siempre externo, y de adelante hacia atrás, y solo es necesario hacerlo una o dos veces al día.

Tras el baño, cámbiate de bañador

Evita la humedad:

  • Cuando salgas de la piscina o del mar, seca bien tu zona íntima, con atención a los pliegues.
  • No lleves el bañador o el bikini puesto mucho tiempo. Una vez que te hayas dado un baño, cámbialo por ropa interior u otra prenda de baño seca. Lleva varios bañadores o bikinis en tu bolsa de playa o piscina.

Hidrátate bien

  • Bebe suficientes líquidos, entre litro y medio y dos litros, sobre todo de agua. Si bebes a menudo ayudas a prevenir las infecciones de orina. Irás más veces al baño, y con la orina se arrastran al exterior las bacterias que pueden haberse quedado en la vejiga urinaria. Así se impide que sigan creciendo.

Usa ropa holgada de tejidos naturales

  • Si utilizas prendas que opriman la zona genital, aumenta la sudoración y, por lo tanto, la humedad.
  • Además utiliza pantalones o leggins de algodón o lino, que transpiran.

¿Cuáles son los síntomas de infección?


Es probable que hayas contraído alguna infección si a pesar de tomar que las precauciones notas los siguientes síntomas:

  • Enrojecimiento de la zona
  • Picor
  • Molestias al hacer pis
  • Irritación
  • Cambios en el color, consistencia y olor del flujo vaginal

¿Qué hacer si notas molestias en tu zona íntima?


Si notas alguna de estas molestias, acude a tu ginecólogo. Solo un profesional podrá decir, tras observar la zona y hacer análisis de orina u otras pruebas si tienes alguna infección, bien por hongos o por bacterias.

Caridad Ruiz
Redactora experta en salud