Reposo durante el embarazo, ¿sí o no?

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embarazo con problemas

El concepto de reposo durante el embarazo está cambiando. Muchas mujeres trabajan, hacen deporte, incluso llegan a la alta competición. Y con frecuencia nos encontramos en consulta con embarazadas que practican actividad física moderada e incluso intensa de forma habitual.

Antes era muy común la recomendación del reposo en cama o reposo absoluto. Una mujer podía estar encamada sin moverse, ni siquiera para ir al baño, unos dos o tres días después de una cesárea…. Y qué decir de aquellas gestantes que presentaban alguna complicación o enfermedad. A las mujeres que manchaban en el primer trimestre se las mantenía en cama durante semanas o incluso meses. También a las que presentaban contracciones antes del término del embarazo, o una placenta baja…

El reposo absoluto puede empeorar el embarazo

Afortunadamente, los estudios científicos han podido demostrar que este reposo absoluto no ha aportado beneficio alguno en el pronóstico de una gestación, y que esta actitud no va a variar la evolución de un embarazo. Por el contrario, este hecho puede empeorar el pronóstico de un embarazo si aumenta el número de complicaciones asociados al reposo:

Reposo relativo: ejercicio físico básico Ahora está de moda el término del reposo relativo en las recomendaciones que se pueden dar a las embarazadas. Este concepto es mucho más adecuado a la realidad de la gestante. Se aplica a aquellas mujeres a las que no se recomienda una actividad intensa, pero no se contraindica el ejercicio físico básico, como el caminar o el aseo diario. Sí se le prohíben los esfuerzos fuertes, como hemos comentado. Este reposo relativo sería el oportuno en casos como: