Semana 28 de embarazo gemelar monocorial
Medición del cérvix, analíticas y vacuna si eres Rh negativo
En la semana 28 de embarazo gemelar monocorial (con una sola placenta) te realizarán una ecografía para comprobar el latido cardiaco de cada gemelo. Además, el médico valorará el crecimiento de cada uno de los bebés mediante la medición de la circunferencia de la cabeza (diámetro biparietal), del abdomen (circunferencia abdominal) y la longitud del fémur.
También se debe realizar una ecografía "doppler" de las arterias umbilicales de ambos bebés para comprobar su bienestar y que están recibido el aporte de oxígeno y de nutrientes necesarios para su correcto desarrollo y crecimiento.
Cada uno de los bebés mide ahora alrededor de 38 centímetros desde la cabeza a los pies y cada uno puede pesar un kilo más o menos.
Si la cérvix mide menos de 25 milímetros…
De nuevo es importante la realización de una cervicometría o medición del cuello uterino independientemente de que tu hayas o no tenido contracciones. Si el cérvix es menor de 25 milímetros se valorará la colocación de un pesario cervical en los centros donde se coloquen. Aun así, debes saber que tienes que restringir tu actividad física porque puede contribuir al desencadenamiento de contracciones.
En muchos centros, se solicita una analítica de sangre y orina en la semana 28 de embarazo para ir controlando fundamentalmente la anemia que en vosotras se multiplica por cinco con respecto a una gestación única. Con frecuencia a partir de este momento se os añade un suplemento de hierro a todas gestantes de gemelos que en lassemana 24 no os los hubiesen administrado.
Si eres Rh negativo, toca vacunarse
Pueden también solicitarse hormonas tiroideas y serología para citomegalovirus y toxoplasmosis en la analítica de la semana 28. Recuerda que si eres Rh negativo, debes ponerte la vacuna de la gammaglobulina antiD justo en esta semana.
Cómo se encuentra la embarazada de gemelos en la semana 28
Con respecto a ti, estarás más cansada y probablemente cada vez duermas peor por el movimiento de tus bebés que te impidan encontrar una postura adecuada y también por el propio insomnio del embarazo que en vosotras es más pronunciado. Sueles estar cansada y con sueño a última hora del día, pero luego al tumbarte en la cama te cueste conciliar el sueño, o si no, te depiertes a mitad de la noche con la sensación de que ya has dormido las horas suficientes.
Notarás un aumento en el flujo vaginal de color blanco a amarillento de consistencia más espesa que el flujo habitual. Esto no es una infección, sino la llamada leucorrea causada por el aumento de flujo sanguíneo en la mucosa vaginal y el trasudado que ello conlleva. Además, debido a este aumento de flujo sanguíneo, tanto en la vagina, como en los músculos que la rodean, la vagina toma una coloración violácea típica del embarazo. Es lo que se llama el signo de Chadwick. Notarás también los labios mayores y menores más abultados de lo normal.
Los tobillos pueden hincharse, así como las manos y la cara. Es fundamental restringir la sal de la dieta. Poner los pies en alto y realizar movimientos circulares con los mismos. Las duchas de agua fría en las piernas de la embarazada, así como el masaje ascendente pueden contribuir a tu mejoría, aunque para serte sincera, sólo desaparecerá esa hinchazón cuando hayan nacido tus bebés…
Los bebés cada vez se moverán más y a veces pueden producirte dolor. Intenta encontrar la postura más adecuada para ellos. No estés mucho tiempo sentada, pero tampoco mucho tiempo de pie y siempre que te tumbes hazlo de lado, preferiblemente el izquierdo.
Dolor de espalda
- El dolor de espalda o lumbalgia durante el embarazo puede aparecer mucho antes que en las gestaciones únicas. Por el peso del útero, la espalda se arquea hacia atrás produciendo la llamada hiperlordosis y desencadenando desde dolor de espalda hasta una ciática por compresión de las vértebras del nervio ciático.
- En el caso de tener una hernia ciática el dolor se desplazará desde el glúteo, por la cara posterior del muslo y llegará hasta el píe de uno de los lados. En estos casos puedes acudir a un fisioterapeuta.
- La práctica de Pilates contribuirá a tu mejoría. La natación reforzará los músculos de la espalda. Pero siempre que vayas a practicar un ejercicio debes consultárselo a tu médico. Para aliviar el dolor también puedes tomar Paracetamol de 1 gramo cada 8 horas. Antes de salir de la consulta, te pesarán y te tomarán la tensión.