Niño con dolor de tripa crónico, ¿qué hacemos?
Muchas veces no se debe a una enfermedad previa
El dolor de tripa crónico en niños es todavía más frecuente que el dolor abdominal agudo pero en casi el 90% de los casos no se debe a ninguna patología o enfermedad subyacente. Se estima que aproximadamente entre el 13 y 17% de los niños lo van a padecer. Es bastante frecuente a partir de los 5 años y en mayores de 9 años, predomina en niñas. Suele causar bastante alarma en los familiares y supone una consulta muy frecuente en las consultas de Atención Primaria y de Gastroenterología Infantil.
Cuándo es dolor abdominal crónico
Hablamos de dolor abdominal crónico cuando suceden tres o más episodios de dolor de tripa tan intenso como para limitar la actividad cotidiana del niño, durante un periodo de tiempo igual o superior a tres meses y con ausencia de dolor entre las crisis.
En el 2005, la Academia Americana de Pediatría y la Sociedad Norteamericana de Gastroenterología, Hepatología y Nutrición Pediátrica recomendaron no emplear el término recurrente y denominar este cuadro como dolor abdominal crónico. Aunque puede ser debido a causas orgánicas, la mayoría de los casos son de origen funcional o por somatización, sobre todo en mayores de 4 años.
Dolor abdominal funcional... ¿qué es?
En un dolor que no es consecuencia de ninguna enfermedad o patología y cuya causa es no está bien aclarada pese a existir varias teorías al respecto. Desde hace tiempo se ha hablado de la alteración de la motilidad intestinal desencadenada por la tensión emocional y otras alteraciones del sistema nervioso.
Sin embargo, varios estudios apoyan que se trata de una alteración de la reactividad intestinal; los procesos alérgicos, inflamatorios o infecciosos harían que los nervios sensitivos del intestino queden sensibilizados, de forma que posteriormente ante pequeños cambios de la presión en el interior del intestino se desencadenaría una respuesta dolorosa desproporcionada.
Qué pruebas tiene que hacerse el niño
El dolor abdominal crónico es un síntoma por lo que el especialista en Digestivo Infantil deberá valorar, tras la historia clínica y la exploración física, si son necesarias pruebas complementarias (por sospecha de causa orgánica) o bien se trata de un dolor de origen funcional. En estos casos es importante no realizar pruebas complementarias repetitivas, y proceder a un seguimiento en consultas para realizarlas si se detectan signos o síntomas de alarma en la evolución. Si existen signos de alarma o alteraciones en la exploración física se realizarán más pruebas al niño.
Dolor de tripa: Signos que no debes dejar pasar
- Antecedentes familiares de enfermedades digestivas
- Dolor abdominal alejado de la zona que rodea el ombligo
- Dolor que se irradia a la espalda o que despierta por la noche
- Diarrea nocturna
- Heces con sangre
- Vómitos incontrolables
- Pérdida de peso y retraso del crecimiento
- Afectación del estado general: fiebre persistente, dolor de articulaciones
- Abombamiento del abdomen o masas palpables
- Dolor o dificultad al tragar alimentos
- Fisuras o úlceras en la zona perianal