El cerebro de la madre cambia según cómo viva su parto

07 Mar 2025
El cerebro de la madre cambia en el embarazo y el parto

Tras el  embarazo y el nacimiento del pequeño, casi todas las mujeres reconocen que no son las mismas. Notan que después de dar a luz algo es diferente en ellas, sobre todo si su parto fue complicado o si después de dar a luz pasaron por una depresión posparto. Las madres, además, son capaces de recordar siempre y a lo largo de toda su vida cómo fue el parto de cada uno de sus hijos.

Esta percepción de cambio en su forma de ver la vida ahora se ha demostrado que existe una causa fisiológica en un estudio que se ha publicado en la revista Science Advances y que han realizado científicas del grupo de investigación Neuroimagen “Neuromaternal”, del Instituto de Investigación Sanitaria del Hospital Gregorio Marañón.

Una investigación realizada en el Hospital General Universitario Gregorio Marañón, de Madrid, ha encontrado que en el cerebro de las mujeres se producen cambios con el parto y el posparto,  y que estas modificaciones van a depender de su experiencia de parto y de los síntomas de depresión posparto. Los cambios son un aumento del volumen del hipocampo y de la amígdala. Estas dos zonas del cerebro son áreas muy pequeñas del cerebro. El hipocampo está relacionado con la memoria a largo plazo. La amígdala del cerebro controla todo lo relacionado con las emociones y los sentimientos.

En el estudio se tomaron imágenes de resonancia magnética de 88 madres primerizas al final del tercer trimestre y en el primer mes del posparto, y a 30 mujeres sin hijos, así comprobaron cambios cerebrales. Observaron que en el embarazo no se produjeron diferencias. Pero en las últimas semanas del embarazo y en los primeros meses tras el parto, la estructura del hipocampo y de la amígdala sí que eran diferentes: El hipocampo era más grande si el parto no fue bueno y la amígdala también creció en las madres que tuvieron depresión posparto. “El parto y el posparto son momentos de gran intensidad emocional que la madre recuerda durante toda su vida. Cambia su vida y puede cambiar su cuerpo, un cuerpo ubicado también en un contexto e influenciado por él”, concluye Cristina Ballesteros, investigadora del grupo de Neuroimagen del IiSGM y una de las autoras del trabajo.

El cerebro materno se adapta

Según las investigadoras, el aumento del hipocampo y de la amígdala se pueden interpretar como adaptaciones a los eventos desafiantes del parto y la maternidad. Este conocimiento podría servir en un futuro para prevenir y tratar con antelación la depresión posparto. 

Este no es el primer trabajo de investigación centrado en cómo la maternidad cambia el cerebro de la mujer. Ya antes hubo uno que demostró que en el embarazo se producía una reducción en el volumen de la sustancia gris del cerebro. “En los últimos años, hemos visto como los cambios que acontecen durante el embarazo son similares a los que ocurren durante la adolescencia, ambos periodos marcados por una reducción en el volumen de la sustancia gris en el cerebro”, explica María Paternina-Die, también autora del estudio e investigadora del grupo de Neuroimagen del centro.

Caridad Ruiz
Redactora especializada en salud