Hacer ejercicio en el embarazo ayuda a prevenir la diabetes gestacional
El ejercicio aeróbico durante el embarazo puede ayudar a mantener a raya la diabetes gestacional. Un estudio de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) y el Hospital Universitario Puerta de Hierro de Majadahonda (Madrid) ha comprobado que las embarazadas que practican ejercicio moderado y supervisado durante la gestación tienen menos riesgo de padecer diabetes gestacional.
Un total de 257 embarazadas sanas formaron parte del ensayo clínico. Una parte, 101 de ellas, participaron en un programa de ejercicio aeróbico programado inmediatamente después de su primera ecografía (semana 10-12 de embarazo) hasta el final de la gestación. El resto, 156 mujeres, no realizó ningún entrenamiento y recibió los cuidados habituales durante todo su embarazo.
Madres sanas y en forma
Las futuras madres que participaron en el programa de entrenamiento realizaron tres sesiones semanales, dos en sala y una en piscina, de entre 50 y 60 minutos de ejercicio aeróbico moderado, conducido por una profesional de la Facultad de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte.
Los investigadores observaron que después del parto el número de casos fue significativamente mayor entre las madres que no habían practicado ejercicio (13 casos de diabetes gestacional frente a uno del grupo que realizó entrenamiento). Las conclusiones del estudio se han publicado en la revista “Medicine and Science in Sports and Exercise” y según sus autores abren las puertas a la utilización del ejercicio físico moderado y supervisado en la prevención de la diabetes mellitus gestacional.
Complicaciones por diabetes en el embarazo y tras el parto
La diabetes gestacional puede darse en mujeres embarazadas que no tenían este trastorno previamente. Se produce por un aumento de los niveles de glucosa en la sangre de la embarazada cuando ésta no es capaz de producir o aprovechar la insulina que necesita en la gestación. Las hormonas que produce la placenta son las responsables de este tipo de trastorno, que suele desaparecer después del parto.
Las complicaciones que esta afección puede provocar en el embarazo incluyen deterioros en la salud de la madre, el feto e incluso el recién nacido. Algunos estudios han descubierto una relación entre la diabetes gestacional y alteraciones postnatales metabólicas y cardiovasculares tanto en la madre como en el niño.
La diabetes gestacional también puede causar problemas en el parto, debido al gran tamaño del bebé, que puede sufrir dificultades respiratorias y tiene un riesgo mayor de padecer en el futuro diabetes u obesidad.