Puntos posparto, todos los signos y señales de alarma
Cómo saber si la cicatriz de la episiotomía o la cesárea está infectada
Ya hemos pasado el parto, volvemos a casa y tanto si fue un parto vaginal como si fue una cesárea nos encontramos con un compañero de viaje inesperado, los puntos. ¿Cómo hay que cuidarlos en casa? Casi nadie se imagina que después de pasar por un momento tan intenso como es un parto, unos insignificantes puntos en nuestra piel nos puedan provocar tantas molestias y tantos quebraderos de cabeza.
Cómo se curan las cicatrices de la episiotomía o la cesárea
Las cicatrices que no puedan surgir del parto, ya sean por desgarros, realización de episiotomía o cesárea, siguen un proceso de curación similar al de cualquier otra herida.
Los primeros días nuestro organismo reacciona frente al trauma que supone cualquier herida, preparándose para combatir los posibles agentes infecciosos, evitar hemorragias e ir preparando el tejido para su regeneración, también trata de eliminar las posibles impurezas que pudieran haber quedado, de forma que encontraremos la herida inflamada y enrojecida. Esto va desapareciendo a lo largo de los días.
Aun teniendo grapas, lo normal es que nos aparezca una costra en la cicatriz. Esta costra protege la herida mientras se inicia la curación. Debajo de la costra se forma el tejido nuevo, se reparan los vasos sanguíneos que pudieran haberse dañado y se vuelve a unir el tejido dañado gracias a la formación de colágeno.
Cómo son los puntos de la episiotomía o de la cesárea
Normalmente en el caso de las episiotomías o los desgarros del periné, los puntos son reabsorbibles, de forma que se caen solos según la herida va curando.
En el caso de la cesárea puede ocurrir que tengamos grapas para aproximar los bordes o sutura intradérmica.
✅ Las grapas nos las retirará, habitualmente, nuestra matrona una vez que la herida haya cicatrizado, generalmente a los 10 días de la cesárea.
✅ Según el estado de la cicatriz puede ser necesario retirar la mitad de las grapas y esperar unos días para retirar el resto.
✅En el caso de la sutura intradérmica no es necesario quitar los puntos, puesto que estos se dan bajo la capa más superficial de la piel y no se ven desde el exterior.
¿Cómo cuidar los puntos en casa?
Los cuidados posparto son similares en cualquiera de los casos, salvo otras indicaciones por parte de tu ginecólogo o matrona.
- Mantener la herida limpia y seca.
- Lavado con agua y jabón neutro una vez al día.
- No utilizar antisépticos salvo prescripción del personal sanitario.
- Secar correctamente la herida mediante toques suaves con una toalla o compresa limpia. No restregar y en el caso de las cicatrices en periné limpiar siempre de delante hacia detrás.
- Utilizar compresas tocológicas de algodón o de celulosa.
- Utilizar ropa interior de fibras naturales. En el caso de las cesáreas es importante evitar que los elásticos rocen la cicatriz.
- Utiliza ropa holgada, preferiblemente de fibras naturales. Evita pantalones ajustados.
- No tires de los puntos o de las grapas.
¿Cómo sé que los puntos están infectados?
Durante la cicatrización de la herida, lo normal es que la inflamación y enrojecimiento inicial van, poco a poco desapareciendo, así como el dolor. Si observamos alguno de los siguientes signos de alarma es importante contactar con nuestra matrona para que haga una valoración de la herida.
- Dolor en la zona que va en aumento.
- Aumento de la inflamación en la cicatriz.
- No disminuye el enrojecimiento de la zona.
- Aprecias que la herida está caliente.
- Notas la cicatriz endurecida o abierta.
- Aparece alguna zona de la cicatriz mas inflamada, enrojecida, caliente y da la sensación de tener líquido dentro
- Notas que la cicatriz expulsa líquido. No esperes a que tenga aspecto de pus, aunque te parezca líquido claro, consulta.
- La herida sangra, o bien los bordes de la herida aparecen negruzcos o con mal aspecto.
- Tienes fiebre y notas malestar.
Si crees que los puntos se han infectado, consulta con tu matrona
En cualquiera de estos casos puede que la cicatriz se haya infectado, de forma que tendrás que tener algunos cuidados especiales y tratamiento específico. La mejor manera de prevenir es acudir a las revisiones con tu matrona, ella te explicará todos los signos de alarma y valorará tu estado general.