No es un camino de rosas: en la lactancia materna pueden surgir muchos problemas, como las grietas o la mastitis, que por suerte tienen solución. Saber cómo actuar ante esas dificultades es básico para que la madre pueda continuar dando el pecho a su hijo y este se beneficie de todo lo que le aporta la leche materna. Antes de tirar la toalla, recuerda que casi todas las dificultades de la lactancia tienen remedio.