¿Nada de ejercicio durante el embarazo? La respuesta es no
Los cambios físicos derivados del embarazo, el aumento de peso en la gestación, la alteración del equilibrio, la sensación de torpeza al moverte… son factores que pueden condicionar a que la etapa de la espera de tu bebé sea una parada brusca en el ejercicio físico que realizabas en tu vida cotidiana.
A estos condicionantes propios de la gestación, se asocia uno muy importante que es lo que te dice la gente de tu alrededor, las personas que te quieren y que se preocupen por ti, aconsejándote que es mejor que durante nueve meses no hagas el loco y dejes que tu cuerpo se llene de curvas para que tu bebé crezca sano y hermoso.
Esto es un grandísimo error, debido fundamentalmente a que llevar una actividad física regular y moderada, te va a favorecer a multitud de aspectos; no sólo durante el embarazo, sino también en el parto y el posterior puerperio.
El ejercicio físico que se debe realizar durante la gestación es ejercicio aeróbico, evitando los ejercicios de impacto. Además, todo esto viene condicionado por la actividad que realizabas antes del embarazo. Es decir, si eres una deportista de élite o bien no haces deporte de manera habitual, los ejercicios durante esta fase no pueden ser los mismos.
Mantener el tono muscular y el suelo pélvico
El caminar o la natación son los dos deportes que se recomiendan con más asiduidad durante el embarazo, puesto que son los que ejercitan de manera más completa toda la musculatura corporal. Los estiramientos que se llevan a cabo, en el momento actual, en las clases de Pilates o yoga adaptado a embarazadas, también son muy aconsejables, además se pueden realizar al unísono ejercicios de suelo pélvico que te van a ayudar a fortalecer esta zona.
Disminuye los dolores lumbares
Cuando realizas deporte durante el embarazo, aunque sea exclusivamente caminar de cuarenta minutos a una hora todos los días, mejoras el tono de los músculos no sólo de los miembros inferiores, sino también del abdomen y la espalda, disminuyendo, en gran medida los dolores lumbares que acaecen durante la gestación. En paralelo, se disminuyen los niveles de azúcar y las cifras de tensión arterial, por lo que estás mitigando dos de las patologías concomitantes en el embarazo más comunes en nuestra sociedad.
Responderás mejor a los pujos del parto
En contraposición, el estar en reposo te condiciona a que en el momento del parto no vas a poder responder con los pujos de igual manera que una embarazada que ha estado haciendo algo de actividad física durante su gestación. Se responde mejor al estrés acontecido durante el parto si se ha realizado deporte.
Te ayuda a sentirme más guapa y en forma
Después de esta apología del ejercicio durante la gestación, nos gustaría explicarte que el deporte no sólo es bueno desde un punto de vista físico, sino que te va a ayudar a tener un momento para ti y tu bebé, sentirte más guapa, con una actitud más positiva. El embarazo se te va a pasar velozmente si cada día tienes un ratito para cuidarte, pensando que de esta manera, haciendo deporte, no sólo te ayudas a ti sino también a tu bebé.
Mejora la recuperación del posparto
Y, por último, cómo no, la recuperación física es mucho mejor, dado que has estado nueve meses preparando una carrera de fondo que mediante el parto alcanzas tu meta, tu bebé. Tu bebé, ese pequeño ser tan deseado, pero que tienes que cuidar íntegramente tú con la ayuda de tu pareja o familia, pero al fin y al cabo, tú, precisa una atención continua. Por consiguiente, la recuperación debe ser cuanto más rápida mejor, y el estado físico del que partes es muy importante para tu puesta a punto.