¿Es normal que me duela el ombligo estando embarazada?
"Me duele el ombligo sólo con rozarlo…", es una consulta común de muchas embarazadas a su ginecólogo. Todas las mujeres sabemos que durante el embarazo se van a producir una serie de cambios fisiológicos y necesarios en el organismo. Pero, en algunas ocasiones nos genera una serie de dudas de hasta qué punto esas modificaciones son normales o no. Empecemos por el principio, analizando cómo cambia la tripa a medida que avanza el embarazo:
Embarazada con dolor por la distensión del abdomen
Uno de los cambios más llamativos es la distensión del abdomen. La tripa va creciendo durante las cuarenta semanas que dura un embarazo hasta llegar un momento en el que piensas que va a estallar y no lo vas a poder evitar. Esta evolución se suele producir poco a poco, permitiendo que los órganos internos vayan distribuyéndose de la manera más idónea para que no se vean muy comprimidos y que la piel de la embarazada pueda distenderse lo suficiente.
Puedes tener estrías en la tripa
A lo largo del estiramiento de la piel puede producirse un fenómeno estético: las odiadas estrías del embarazo. Lo más importante para su tratamiento es intentar evitar su aparición. ¿Cómo? Empleando cremas desde el principio del embarazo y manteniendo una adecuada ingesta de líquidos.
El control del peso durante la gestación, intentando no aumentar de manera excesiva el mismo en poco tiempo, también va a favorecer que la piel del abdomen se estire de manera más lenta, disminuyendo la aparición de las estrías. Pero, existe un factor determinante y, sobre el que se poco podemos hacer, que es la genética. Cada mujer tiene un tipo de piel y existen algunos grupos que presentan una mayor predisposición a las estrías, a pesar de haber realizado todas las medidas de prevención oportunas. No obstante, es importante para nosotras intentar que no aparezcan.
Cómo es el dolor de la gestante alrededor del ombligo
Hasta ahora de lo que hemos hablado es puramente de lo que se ve, pero el problema es cuando los cambios del abdomen producen un dolor que no se ve. La embarazada lo describe como un dolor muy importante alrededor del ombligo. En la consulta las gestantes lo describen como: "Me duele el ombligo sólo con rozarlo".
Lo primero de todo es llevar a cabo una exploración exhaustiva del abdomen, descartando patología orgánica, tales como signos de apendicitis, que debería estar asociado a otros síntomas más generales (fiebre, vómito, malestar general), así como una posible hernia umbilical. En algunas embarazadas se produce una protusión del ombligo, siendo en ocasiones fisiológico y en otras, patológico. En los casos de hernia umbilical durante el embarazo, no es necesario intervenir a no ser que venga asociado a alguna complicación.
Qué hacer para calmar el dolor de ombligo
Cuando no existe causa palpable de ese dolor periumbilical (alrededor del ombligo), pero la embarazada no se puede ni tocar, por lo general se relaciona con lo descrito anteriormente, la tripa ha crecido rápidamente, produciendo una distensión de la piel tan veloz que no ha permitido a la misma adaptarse al cambio. Consejos para paliar o prevenir el dolor umbilical:
- Es aconsejable una buena hidratación del abdomen y, en algunas ocasiones puede ser beneficioso, el empleo de una faja de embarazada o ropa interior que tape la tripita, siempre y cuando te lo recomiende tu ginecólogo o tu matrona.
- Cuídate, hidrátate y sube de peso de manera progresiva, puesto que todo ello va a permitir que tu cuerpo pueda adaptarse a este nuevo estado, se acomode a los cambios necesarios durante la espera de tu bebé.