Vacaciones tranquilas y seguras para embarazadas
Este verano es especial porque estás embarazada… Muchas mujeres tienen dudas sobre lo que está permitido hacer o no, dónde y cómo se puede viajar en el embarazo, que actividades se desaconsejan, qué riesgos puede haber... A esto se suman los consejos del entorno que a veces resultan algo alarmistas. Los consejos generales para toda embarazada cuya gestación haya evolucionado sin problemas, independientemente del lugar elegido para las vacaciones incluyen:
- Protección solar, siempre. Emplea siempre protección solar de alto filtro para evitar quemaduras en la piel y la aparición de las manchas, especialmente en la cara (cloasma).
- Cuidado con el sol. Evitar la exposición solar abusiva y las horas más calurosas del día para prevenir golpes de calor.
- Hidratación abundante. Mantener un nivel de hidratación adecuada para la embarazada para evitar episodios de hipotensión y golpes de calor a los cuales son más susceptibles las gestantes.
- Indumentaria adecuada. Emplear ropa de tejidos livianos y transpirables con calzado cómodo para el verano y tu estado de gestación.
- Siempre con los papeles encima. Por último, una embarazada siempre debe de llevar consigo su documentación médica para que en caso de urgencia pueda ser atendida en cualquier centro sanitario.
¿Puedo bañarme en playas o ríos si estoy gestando?
- Baños permitidos. En el caso de que tu destino sea un lugar acuático como la playa o el río, debes saber que a no ser que expresamente te hayan recomendado que no realices baños, estos están permitidos.
- Agua apta. En el caso de que tu destino sea el río además de las recomendaciones respecto al baño, lo primero que hay que conocer es si el lugar elegido tiene agua apta para el baño. Existen algunas zonas restringidas para el baño humano por el riesgo de transmisión de enfermedades como las aguas estancadas.
- Bañarte beneficia. Además los baños te vienen muy bien, ya que pueden favorecer la circulación sanguínea en las piernas, disminuyendo la pesadez de las mismas, de igual forma, los paseos por la orilla del mar o pisando las piedras y la arena estimula del mismo modo.
- Humedad fuera. Se recomienda cambiar la ropa de baño tras mojarse, evitando en todo momento que este húmeda, para evitar de este modo cualquier tipo de infección.
Embarazada de vacaciones en la montaña
Las mujeres que deciden ir a la montaña normalmente realizan senderismo o caminatas. Esta actividad no está prohibida, puede favorecer el estado físico adecuado en el embarazo y controlar la ganancia de peso, pero sí que deben de limitarse en cuanto a su duración e intensidad. Regulando estos dos aspectos según la preparación o a lo que estuviera acostumbrada previamente la mujer pueden permitirse sin ningún problema.
De este modo, si una mujer habitualmente realiza rutas largas, puede realizarlas disminuyendo su duración progresivamente según aumenta el embarazo y extremando siempre una adecuada hidratación. En el caso de que la ruta implique un ascenso importante no estaría recomendada, ya que se ve disminuida la concentración de oxígeno ambiente.