¿Puedo viajar estando embarazada?
Ya sea por vacaciones o trabajo, cuando una embarazada debe realizar un viaje, suele tener dudas sobre si es recomendable o no, el medio de transporte más adecuado, las horas de viaje límites, o si es peligroso o no para el bebé...
En principio, como regla general, los viajes en un embarazo en el que ha ido todo bien no están prohibidos. Tradicionalmente se ha recomendado evitar viajes largos, en los primeros tres meses de gestación, por que se decía que aumentaba el riesgo de aborto. La realidad es que no existe ninguna evidencia científica que respalde esa afirmación. Pero no cabe duda que las primeras semanas suponen las de mayor riesgo de aborto y de incertidumbre, por lo que muchas mujeres prefieren no viajar.
El medio de transporte
El medio de transporte (avión, tren, automóvil, autocar) no influye tampoco en el porvenir del embarazo, pero sí pueden afectar a la comodidad de la gestante durante el trayecto. Por ello, se deben evitar viajes largos y se deben de recomendar descansos y movilización cada dos horas al menos, principalmente de los miembros inferiores.
El principal problema de la inmovilización en el embarazo es que puede desencadenar complicaciones trombóticas y más frecuentemente disconfort. Principalmente y lo más habitual son los edemas de piernas. El riesgo de esta complicación aumenta a medida que el embarazo avanza.
Este edema e inmovilización dificulta el retorno venoso de la sangre, lo que puede favorecer en casos extremos la formación de un trombo sanguíneo venoso. Esto es raro, pero puede ocurrir en el embarazo, sobre todo cuando existen otros factores de riesgo en la embarazada. Por ello, es recomendable los paseos, los descansos, e intentar mover los miembros inferiores durante el trayecto.
Prevenir los trombos
No obstante toda embarazada debería preguntar a su obstetra si existe algún riesgo añadido en su caso concreto y si debes tomar alguna precaución adicional. En casos de alto riesgo trombótico puede ser conveniente administrar a la gestante una dosis de heparina profilácticaque evite la formación de coágulos en la sangre.
Por otro lado existen dudas sobre la conveniencia o no de viajar una vez se han sobrepasado las 37 semanas. En muchos medios de transporte está limitado el viaje a partir de esas semanas si no se aporta un informe médico que lo permita.
En el caso del avión es necesario este informe desde semanas antes y habitualmente no permiten viajar a partir de las 34-35 semanas de gestación en ningún caso a pesar de informes médicos.
Qué hacer al terminar el viaje
Por ello, los viajes a partir de la semana 37 suelen ser en coche. Siempre se aconseja, cuando se llegue al destino, conocer los centros sanitarios cercanos, por si acontece el parto u ocurre alguna complicación y llevar consigo la historia clínica del embarazo. Aunque el parto es más probable que ocurra a partir de la semana 40, puede producirse a partir de la 37, por lo que es recomendable estar cerca del centro sanitario donde la mujer haya decidido dar a luz a partir de esas semanas.