Cómo prevenir y tratar las estrías en la embarazada

Durante el embarazo, la piel de la gestante experimenta cambios. Entre estos cambios se producen las temidas estrías, que principalmente aparecen en abdomen muslos y mamas, las zonas del organismo que más transformaciones en su tamaño van a experimentar en este proceso. La aparición de estrías cutáneas se debe a un doble efecto: el mecánico, potenciado por el efecto hormonal. Y van a aparecer en un 90 por ciento de todas las embarazadas y principalmente durante el segundo y el tercer trimestre de gestación.

La piel del ser humano presenta una capa externa (la epidermis), sobre una capa colágena que le da sustento (la dermis). Es en esta capa dérmica donde se van a generar los cambios que producen las estrías. Este colágeno de la dermis se va a debilitar, produciendo disminución de la elasticidad de la piel por un efecto hormonal de los estrógenos y corticoides, el cual es favorecido por el efecto mecánico del estiramiento. Van a producir unas líneas sinuosas de color rosa pálido o blanco. Tras el parto, estas estrías pueden atenuarse, incluso desaparecer, aunque lo más frecuente es que se transformen en bandas de piel atrófica sin ninguna coloración.

Consejos para atenuar o evitar las estrías

• Existen muchas recomendaciones sobre la posibilidad de prevenir la aparición de estrías e incluso tratarlas. Como hemos visto, se deben a un efecto combinado de dos factores. Por un lado, el factor hormonal es necesario e indispensable durante el embarazo, por lo que no se pueden proporcionar tratamientos orientados a disminuir su concentración.
• Por otro lado, el efecto mecánico es sobre el que podemos actuar para evitar aparición de estrías o al menos, disminuirlas. Para disminuir la distensión, lo mejor es conseguir una ganancia de peso adecuada durante el embarazo, nunca excesiva. También la elasticidad de la piel previa al embarazo y durante el mismo es un factor protector para su aparición. Factores que favorecen su elasticidad son una piel bien hidratada, el ejercicio físico y flexibilidad del organismo, así como una dieta sana y equilibrada.
• Existen muchos productos en el mercado que pueden prevenir las estrías. Entre ellos encontramos cremas o aceites que contienen rosa de mosqueta, o ácido linoleico o glicólico o ácido ascórbico. Su empleo se basa en el efecto que tienen estas sustancias en favorecer la síntesis de colágeno y de elastina de forma correcta en la dermis. Su efecto ha podido ser demostrado, ya que al microscopio se ha objetivado un aumento en el contenido de elastina, así como una mejora del aspecto de las estrías. Por el contrario, aunque presentan beneficios, estos productos no son suficientes para evitar su aparición, aunque pueden disminuir su cuantía e intensidad.
• El ácido retinoico ha sido claramente demostrado como el tratamiento más efectivo para anular la aparición de estrías cutáneas, pero está totalmente contraindicado durante la gestación por sus efectos perjudiciales sobre el feto produciendo malformaciones importantes.

En conclusión, podemos disminuir la aparición de las estrías, aunque no evitarlas en su totalidad manteniendo una condición física adecuada, una dieta equilibrada, consiguiendo una ganancia de peso correcta y utilizando cremas o lociones para mantener una piel hidratada.