10 molestias de las primeras semanas de embarazo

Durante las primeras semanas de gestación, y a lo largo del primer trimestre, es muy habitual presentar síntomas de embarazo muy variados que con frecuencia traen de cabeza a la nueva gestante porque esta confundida acerca de lo que es normal o no sentir. Si los síntomas son intensos, se encontrará mal y se preocupará por ello, y si son muy leves o inexistentes pensará que el embarazo quizás no va bien, y también será motivo de inquietud.

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10 molestias y síntomas de embarazo muy frecuentes

Recopilamos los síntomas más frecuentes que pueden aparecer durante esas primeras semanas de embarazo, a explicar los motivos que los causan y algunos consejos prácticos para aliviarlos.

1. Sin regla (o con amenorrea)

La ausencia de menstruación suele ser el primer síntoma y más evidente. Lo ideal es que comiences a tomar de inmediato un suplemento de ácido fólico (si es que no lo estabas tomando ya), y esperes unos días para realizarte el test de embarazo. Teniendo en cuenta que la concepción se produce generalmente en torno a la mitad del ciclo menstrual, y que los test de embarazo deben realizarse al menos 15 días después para que sean fiables, lo más practico es esperar al menos 5 días de retraso menstrual para hacerlo y no tener que repetirlo.  

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2. Con náuseas y vómitos

Son los síntomas mas conocidos y en los que todos pensamos cuando nos referimos al primer trimestre de embarazo. Se producen por el aumento en sangre de la hormona HCG, y son bastante molestos. En algunas ocasiones representan un verdadero problema llegando a provocar deshidratación en la gestante. Para aliviarlos realiza comidas escasas muy frecuentes, bebe líquidos en escasa cantidad pero de manera muy repetida y consume alimentos que te apetezcan. Recomendable el jengibre, en infusión por ejemplo (máximo dos tazas al día), y si presentas vómitos frecuentes, debes consultar de inmediato con tu médico para ser valorada convenientemente.  

3. Sensación de mareo

También el mareo un síntoma muy conocido de embarazo (sobre todo gracias a las películas), aunque no son tan frecuentes como los anteriores. Se producen debido a los cambios fisiológicos que experimenta la circulación sanguínea de la embarazada. Para evitarlos procura hidratarte adecuadamente y evita los cambios bruscos de temperatura.

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4. Notas dolor y tensión mamaria

Suele ser leve, generalmente referido como tensión mamaria y un aumento de sensibilidad y volumen del pecho. También está producido por los cambios hormonales, fundamentalmente por el aumento de estrógenos, que estimulan el pecho para comenzar su preparación de cara a lactar tras el parto. Suele producirse durante las primeras semanas, y normalizarse después. Como recomendación te diremos que uses un sujetador adecuado en tamaño y sujeción, por supuesto, sin aros.

5. Dolor abdominal: molestias pélvicas

Se trata de molestias o dolores leves en la región pélvica, similares a los que muchas mujeres sufren durante la menstruación. Se debe al aumento de vascularización y a la congestión pélvica que se produce durante estas primeras semanas de embarazo para asegurar el flujo sanguíneo adecuado al útero, causado fundamentalmente por los estrógenos, y puede aliviarse tomando un baño relajante, aplicando calor moderado en la zona, haciendo reposo relativo y asegurando un adecuado transito intestinal. Si presentas un dolor intenso o si se acompaña de sangrado vaginal, debes consultar de inmediato con tu médico.

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6. Se altera el sueño

Es otro de los síntomas más característicos de embarazo. La alteración del sueño también tiene un origen hormonal, y se produce de manera fisiológica gracias a la progesterona, para que la futura mama descanse, disminuya su actividad y así enfocar el metabolismo y el consumo de nutrientes en el desarrollo del embrión. Es difícil evitarlo, pero mejorara con un buen descanso nocturno y una adecuada higiene del sueño. También el ejercicio físico moderado te ayudara a aumentar tu energía y a descansar mejor.

7. Estreñida y con gases

Durante el primer trimestre de embarazo es muy frecuente el cambio de hábito intestinal, ya que la progesterona retrasa el ritmo intestinal. Lo hace para disminuir el consumo de energía y para asegurar una adecuada absorción de sustancias orgánicas, además de la función de relajación del musculo liso del organismo, enfocada a frenar la irritabilidad uterina.

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Para prevenirlo asegura un consumo de agua de al menos 1,5 o 2 litros al día, y opta por una dieta rica en fibra (con cereales integrales, verdura en abundancia y consumo de la fruta entera, evitando los zumos), y para evitar los gases mastica muy bien los alimentos, no consumas chicle ni bebidas gaseosas, alimentos flatulentos y podrían ayudarte infusiones de hinojo o anís (con moderación)

8. ¿Notas cambios en olfato y gusto?

De nuevo tenemos que mencionar aquí a las hormonas del embarazo. Estos cambios de olfato y gusto son un puro atavismo evolutivo, ya que como mamíferos que somos, la futura madre debe estar en alerta máxima para conseguir comida, alimentarse únicamente con alimentos seguros y adecuados y percibir cualquier peligro que pueda acecharla, por lo que se agudizan sus sentidos de manera fisiológica.

9. Un sangrado vaginal escaso

Cualquier sangrado durante el embarazo, por escaso que sea, debe ponernos sobre aviso y ser consultado y valorado convenientemente. Es cierto que con mucha frecuencia se produce un escaso sangrado escaso (más bien un manchado) en el momento de la implantación del embrión en el endometrio, ya que este esta muy vascularizado para recibir al embrión adecuadamente. Esta implantación suele producirse en torno al día 20 - 24 del ciclo, y si es un poco mas intenso de lo habitual puede llegar a confundirse con la menstruación. Hay muchas mujeres que no lo presentan.

10. Otros síntomas de embarazo menos conocidos

Menos evidentes y conocidos, pero también frecuentes y relacionados con los cambios hormonales, son molestias como el aumento de temperatura corporal, irritabilidad, cambios de humor, aumento de frecuencia miccional, pérdida de apetito, cansancio, antojos o aversión por ciertos alimentos…