Las pruebas en el tercer mes de embarazo
La primera ecografía
Aunque te hayan podido realizar alguna antes por diversas razones, como ocurre en el seguimiento de los embarazos mediante técnicas de reproducción asistida, en las amenazas de aborto o simplemente porque hayas "pedido el favor", en un embarazo normal la primera ecografía que tiene valor es la que se te debe realizar entre las semanas 11 y 14, cuando tu feto mide entre 4,5 y 8,4 centímetros. Este es el momento adecuado para calcular el tiempo de embarazo y para poder medir adecuadamente la translucencia nucal (TN) (que también oirás llamar de forma incorrecta pliegue nucal). Una duda frecuente es si esta ecografía se hace por vía vaginal o abdominal. Si bien es cierto que por vía vaginal "se ve mejor", también tiene sus inconvenientes como la incomodidad que supone para la paciente y las limitaciones que tiene para conseguir algunos planos.
Con los ecógrafos actuales esta exploración se podría realizar en la mayoría de las mujeres por vía abdominal y algunos preferimos realizar toda la exploración por esta vía ya que permite más versatilidad a la hora de conseguir los planos adecuados para la medición de la TN. Otros ecografistas siguen prefiriendo la vía vaginal y otros combinan ambas vías.
En definitiva, debes estar preparada para que te la hagan por cualquiera de las dos vías-o por ambas- sin que pueda decirse que una opción sea mejor que la otra.
Cribado de cromosomopatías
Cada vez en más centros disponen del cribado combinado de cromosomopatías del primer trimestre, aunque aún no es obligatorio. Ya se ha explicado en qué consiste pero pueden surgirte algunas dudas respecto a esta prueba. La primera es cómo interpretar la información que proporciona. Mediante un programa informático se integran tus datos personales (edad, raza, peso…) junto con los datos obtenidos en la ecografía y la analítica. A partir de esta combinación se genera un resultado que indica el riesgo que tienes, con esos datos, de que tu embarazo esté afecto de un problema cromosómico. Por ejemplo, si tu riesgo es de 1/4500 quiere decir que solamente un embarazo entre 4500 con tus mismos datos podría estar afectado. Se dice que el riesgo es alto cuando es mayor de 1/270 ó 1/300 porque es el punto de corte con el que se consiguen detectar 9 de cada 10 casos y solamente hay un 4-5% de mujeres que alcancen este riesgo.
Sin embargo, esta división entre "riesgo alto" y "riesgo bajo" puede ser la más razonable, pero es únicamente orientativa y la posterior decisión de realizarse una prueba invasiva ( amniocentesis o biopsia corial) es absolutamente personal y depende de cada pareja. Para algunas un riesgo de 1/100 les puede parecer un riesgo asumible, pero para otras un riesgo de 1/5000 les puede generar incertidumbre. Algunos ecografistas utilizan los llamados "marcadores de rescate" (hueso nasal, ductus venoso, insuficiencia tricuspídea, ángulo frontomaxilar) para ayudar a decantar la decisión. Sin embargo, se ha de tener presente que el ecografista no hace un estudio cromosómico y la pareja debe estar preparada para que le hablen de porcentajes, pero nunca de "seguridad 100%".