¿Accidente de tráfico estando embarazada?
Estando de guardia hace pocos días, tuve que asistir -junto con muchos otros compañeros- a una mujer embarazada que había sufrido un accidente de tráfico. No había pasado ni una hora cuando otra mujer gestante fue trasladada también por haber estado implicada en un accidente de tráfico. Este hecho me hizo plantearme qué porcentaje de mujeres embarazadas sufre o están implicadas en un accidente de coche. Afortunadamente la Dirección General de Tráfico publica las estadísticas en su web y cualquier persona puede informarme al respecto.
Desafortunadamente los accidentes de tráfico suponen la causa de mortalidad más frecuente en adultos jóvenes (entre 15 y 30 años). Además supone la tercera causa de mortalidad en adultos tras la enfermedad cardiovascular y las neoplasias.
Una de cada 50 gestantes, accidentada
Y en esta afirmación las mujeres embarazadas no son una excepción ya que por asociación, la mayoría de las embarazadas se encuentran en el mismo rango de edad. Es decir, los accidentes de tráfico es la causa de muerte más frecuente en las embarazadas:
- Habitualmente no aparece en las estadísticas de mortalidad materna, ya que no es una causa directa de causa médica, sino de causa ambiental.Si hablamos de estadística, se considera que aproximadamente un 8% de todas las gestantes van a sufrir un accidente de tráfico.
- Esto supone que una de cada 50 mujeres embarazadas lo sufrirá por lo que podemos concluir que es un hecho que va a ocurrir con alta prevalencia.
- Si un accidente de tráfico ya supone un trauma a cualquier persona implicada, este es mucho mayor cuando esta persona está embarazada ya que se añaden las dudas sobre las posibles consecuencias que puede haber tenido sobre la salud del bebé.
- Los efectos del accidente de tráfico serán directamente proporcionales a la energía del impacto, que en términos sencillos podemos resumirlo en la velocidad. Además en impacto en las zonas corporales concretas pueden ser diferentes y en el caso de las embarazadas el más peligroso sería el del abdomen materno.
Líquido amniótico, el gran amortiguador
Estos traumas directos son amortiguados por el líquido amniótico que se encuentra alrededor del bebé y le protege, pero evidentemente traumatismo es de alta como puede ocurrir tráfico, esto puede ser insuficiente. Además en el embarazo la desaceleración que se produce en el momento del impacto que detiene el movimiento va a generar un compromiso importante a nivel placentario. La placenta que se encuentra unida a la cara interna uterina puede ser “despegada” en este momento de desaceleración. Evidentemente esta posibilidad es más probable a mayor velocidad del impacto.
Consulta con un ginecólogo
Toda mujer cuando ha sufrido un accidente de tráfico debe ser valorada para estabilizar su estado médico, priorizando su salud. Y cuando se encuentra estable resulta imprescindible que la salud fetal sea valorada mediante un registro cardiotocográfico al que puede sumarse la realización de una ecografía. Con ello se pretende establecer si existen despegamientos placentarios secundarios.
No siempre pueden ser diagnosticados ni siquiera por ecografía, sobre todo cuando son de pequeño tamaño. Pero para tranquilidad de las madres, los de pequeño tamaño generalmente no tiene repercusión para la salud fetal, y son los despegamientos masivos los que si que pueden comprometer el estado de salud del bebé. Y estos despegamientos o abruptios son identificables ecográficamente y además suelen asociar síntomas maternos como dolor abdominal, sensación de tripa dura y sangrado vaginal. Además suele sospecharse en el registro cardiotocográfico.
El desprendimiento de la placenta es una urgencia obstétrica tanto para la salud del bebé como para la madre.
Aunque las complicaciones para el embarazo se han descrito y pueden ocurrir, la probabilidad real es bastante baja, por lo que la mayoría de las mujeres en esta situación serán dadas de alta a casa siguiendo unas recomendaciones fáciles y observación domiciliaria para poder detectar los síntomas mencionados previamente de forma precoz.