Todos los síntomas, señales y signos de que sufres SOP
El síndrome de ovario poliquístico (SOP) es el síndrome endocrino más frecuente de la mujer en edad fértil: llega a afectar entre un 6% y un 21 % de la población. Su cuadro clínico es muy variable. Puede aparecer con diferentes síntomas como anovulación (la mujer no ovula), ausencia de menstruación, irregularidad de las reglas, hirsutismo, hiperandrogenismo, obesidad, resistencia a la insulina... Todo ello además de una intensidad de los síntomas variable su momento de aparición puede ser distinto, y presentar una evolución diferente.
¿Cómo sé si sufro síndrome de ovario poliquístico?
Los síntomas en cada mujer pueden ser muy diferentes, por lo que no podemos dar una lista de síntomas que sí aparecen y otra de los que no. Tendremos que saber que existen muchos signos y señales asociados pero que la aparición no es obligatoria en todos los casos. Pasamos revista a todos ellos:
Trastornos de la ovulación. El 70% de las mujeres con SOP los presentan. Esto puede traducirse en reglas irregulares o escasas (oligoamenorrea), o ausencia total de menstruación (amenorrea). Es la expresión clínica de una disfunción del ovario que no genera ovulaciones normales. Estos trastornos pueden aparecer ya desde la primera menstruación y suelen mejorar hacia la cuarta década de la vida, al igual que mejora el hiperandrogenismo.
Hiperandrogenismo. Es un aumento de las hormonas sexuales masculinas en sangre de la mujer. Como consecuencia directa del aumento de andrógenos aparece:
- Hirsutismo. Aparición de vello corporal en zonas poco habituales para la mujer como son el pecho y el abdomen, labio superior, barbilla espalda y brazos. Presenta una clasificación según su gravedad basada en la escala de Ferriman en la que se puntúan la cantidad de vello en las diferentes zonas corporales.
- Acné. Comienza con la aparición de las famosas espinillas principalmente en tórax y espalda. Se deben a una alteración inflamatoria del folículo piloso y de la glándula apocrina que le acompaña y aparece en un 30% de las mujeres con SOP.
- Alopecia androgénica. La pérdida de pelo de forma más temprana incluso apareciendo zonas con ausencia de pelo completamente es secundario al aumento de las hormonas masculinas en las mujeres con SOP.
Obesidad. Definida como un índice de masa corporal (IMC) mayor a 30 puede llegar a afectar a más del 50% de las mujeres con SOP y su presencia se asocia a mayor severidad de la enfermedad. Típicamente la obesidad asociada al SOP se define como “tronchar”, esto quiere decir que se acumula grasa en mayor cantidad en abdomen más que en caderas. Este hecho aumenta el riesgo cardiovascular de las pacientes que tienen más riesgos de padecer en un futuro dislipemia (alteración del metabolismo de las grasas), diabetes o hipertensión.
Acantosis nigricans. Se define así la aparición de lesiones en los pliegues cutáneos. Típicamente son lesiones oscuras y aterciopeladas, casi verrugosas, y que son más frecuentes en pacientes con resistencia a la insulina.
Resistencia a la insulina. Es el estado metabólico en el que la cantidad de glucosa absorbida por unidad de insulina es menor que en la población normal, por lo que se precisa de mayor cantidad de insulina para la incorporación de glucosa a la célula, principal elemento energético del organismo. En la población con SOP la resistencia a la insulina está presente hasta en un 50% de todos los casos. Se diagnostica mediante el índice HOMA o lo que es más habitual, realizando curvas de tolerancia a hidratos de carbono.
Consecuencias del SOP para la fertilidad
- Un número menor de ovulaciones produce por tanto una disminución de la posibilidad de conseguir gestación.
- Si se ovula seis veces en un año, la posibilidad de gestación será de tan sólo de seis veces en un año, sumando la imposibilidad de calcular un periodo fértil en estas pacientes.
- Ante una mujer con irregularidades menstruales en la edad fértil y con los síntomas antes mencionados el diagnóstico más probable será el de SOP.