"Tuve cáncer de mama y ahora estoy embarazada"

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embarazo con problemas

Haber pasado un cáncer de mama y estar esperando un bebé sería impensable hace pocos años. Esta enfermedad la relacionábamos con mujeres de edad avanzada, por lo menos, que ya no se encontraban en su periodo fértil. No obstante, debido a los cambios sociales, culturales y laborales, la mujer occidental estamos teniendo nuestros primeros hijos a edades más avanzadas y, no sólo eso, sino que también hemos disminuido el número de hijos. Por otro lado, la incidencia del cáncer de mama en la última década se ha incrementado en una 0,5% anual, sobre todo a expensas de mujeres menores de 50 años.

Como dato a tener en cuenta, el 25% de las mujeres con cáncer de mama son pacientes premenopáusicas, y, de las mismas, un 15% tienen una edad inferior a los 45 años. Por consiguiente, el título de la entrada no va a ser y no es una cosa anecdótica, sino que vamos a ver que progresivamente va a ser más frecuente.

Hay que tener en cuenta que es de vital importancia informar a las pacientes jóvenes que no han cumplido sus deseos de tener un bebé y se les ha diagnosticado un cáncer de mama las diferentes opciones sobre preservación de fertilidad existentes en el momento actual. Al igual que indicarles que el embarazo no empeora la supervivencia de su enfermedad, es seguro. La consulta preconcepcional que se debería hacer en estas pacientes sería no sólo para informarles sobre estos aspectos, sino también para proceder a una reestadificación exhaustiva de la patología mamaria, con exploración física y pruebas complementarias de la mama o de extensión.

Tiempo de espera: entre 6 meses y 2 años

El tiempo de espera idóneo para conseguir una gestación después de haber padecido un cáncer de mama y finalizar su tratamiento es como mínimo de 6 meses y lo recomendable es esperar más de 2 años. No obstante, se debe tener en cuenta no sólo el estadio tumoral al momento del diagnóstico del cáncer de mama y su evolución posterior, sino también la edad de la paciente, que puede condicionar el tiempo de espera.

En los casos de tumores hormonodependientes que han precisado tratamiento con Tamoxifeno, es aconsejable esperar de 6 a 12 meses tras finalizar el mismo, por los efectos teratogénicos (causantes de malformaciones en el feto) que se han descrito de dicho fármaco.

En las pacientes portadoras de la mutación del oncogén BRCA 2 se debe tener especial precaución en los dos años siguientes al diagnóstico por la evolución que puede empeorarse con la gestación. Aunque no existen estudios que desaconsejen el embarazo, sí es preciso informar sobre la situación.

Por todo lo descrito hasta ahora, a una mujer que está viendo la luz después del duro camino de diagnóstico y tratamiento del cáncer de mama se le puede indicar que si desea cumplir sus deseos de ser madre, por supuesto que puede. Se debe realizar una correcta consulta preconcepcional con una nueva estadificación del tumor previo al embarazo y continuar el control de dicha gestación en una consulta de Alto Riesgo Obstétrico, para proceder a la exploración física indicada por los senólogos y expertos en Patología Mamaria, según el protocolo de cada centro.

Dra. Miriam de la Puente
Ginecóloga y Obstetra del Hospital Clínico San Carlos (Madrid)