Cuáles son las ventajas de estar embarazada en verano
Cuando te planteas tu embarazo en verano, te imaginas con tu tripita, vestido o pantalón con camisa suelta, unos zapatos cómodos o sandalias... Es decir, cómoda; la comodidad del buen tiempo es fundamental para una embarazada. Tienes la sensación de mayor fluidez porque no vas comprimida en ropa de invierno. Pero cuando dices que estás embarazada y que vas a tener tripita durante el verano, la gente que te rodea te cuenta los efectos negativos del calor en la gestante como los edemas, insolaciones, deshidratación…El verano y el embarazo no están reñidos y te lo vamos a demostrar.
La natación te interesa No hay que perder de vista las cosas positivas que nos trae el verano. Con el buen tiempo, puedes aprovechar a realizar ejercicio al aire libre, más saludable, porque no es necesario que camines en una cinta dentro de tu casa o de un gimnasio… Dar un paseo por un parque cercano es suficiente y mucho más agradable.
También puedes empezar a utilizar las piscinas al aire libre, porque la natación es uno de los ejercicios más completos para las embarazadas, tanto para su musculatura como para la mente. También puedes aprovechar para salir con tus amigos y familiares y continuar con tu vida social, a pesar de tu tripita más abultada.
Evita el edema de piernas Todo esto, aunque no lo creas, puede ir asociado a una mejoría de los síntomas negativos asociados al calor y embarazo, como son el hinchazón de los miembros inferiores. Te damos unas sencillas pautas:
- Realiza ejercicio físico a diario
- Evitar ropa y el calzado que te comprima las piernas, lo que contribuye a reducir los edemas de las piernas.
- El zapato ideal es el que te sujeta el pie pero que no te oprime
- Al asearte debes tener precaución y utilizar el agua fría al final de la ducha
- Pon los pies en alto para que no se desarrollen hinchazones en las piernas
Más frutas y verduras Con el calor cambia también el tipo de dieta que apetece comer: favorece mucho a que la embarazada mantenga un régimen alimenticio equilibrado de estilo mediterráneo. Al incrementar la ingesta de verduras junto con hidratación abundante, vas a mantener un peso correcto, menor hinchazón, y un mejor tránsito intestinal.
Lo cierto es que el verano es una buena época para estar embarazada aunque tienes que estar dispuesta a cuidarte de manera estrecha e intentando que la ansiedad que genera la sociedad sobre los edemas o el calor no te hundan. Debes estar tranquila y preparada para tener un embarazo estupendo lleno de momentos divertidos y especiales durante este verano.